Barcala, Bellido, Echávarri y Pavón, durante el brindis navideño. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. Las posiciones políticas sobre el proyecto de presupuestos de la ciudad de Alicante continúan estancadas a expensas de lo que pueda suceder en el periodo de enmiendas. Así lo ha confirmado este viernes el alcalde, Gabriel Echávarri (PSOE), en el tradicional brindis navideño de la corporación municipal con los medios de comunicación en el que, con todo, ha apelado a la responsabilidad de los grupos de la oposición para que no bloqueen su aprobación.
El primer edil ha reiterado que, a su juicio, el grupo municipal de Ciudadanos (C's) ha perdido una oportunidad para influir en la composición de las cuentas "que ya hubiésemos querido tener nosotros cuando estábamos en la oposición". En su opinión, C's ha cometido una equivocación al plantear su lista de líneas rojas y ha insistido, como ya apuntó la edil de Hacienda, Sofía Morales, el miércoles, que seguramente se podrían haber incorporado gran parte de las propuestas de contenido económico que C's había presentado en su segundo documento para la negociación. "Las estudiamos y creo que podíamos haberlas asumido al 98%", ha dicho. "En fin, no vamos a reiterarnos, pero han desperdiciado una posibilidad de participar en un presupuesto y no hay nada más ideológico que eso", ha resumido. "En esta nueva fase, el proceso de modificaciones está muy tasado y es muy limitado", ha recalcado.
Acto seguido, ha confiado en que, durante la fase de presentación de enmiendas, pueda haber un acuerdo con alguno de los grupos de la oposición para que las cuentas acaben aprobándose. "No es bueno que el presupuesto de 2016 se prorrogue para 2017 porque se quedan fuera inversiones importantes y proyectos subvencionados por la Unión Europea" como la reurbanización que contempla EDUSI de las Cigarrreras. "Nos sentaremos también con el PP" en esa fase de enmiendas "y veremos qué pasa", ha dicho. En esta línea, ha recalcado que el presupuesto entra en su trámite ordinario para que pase el trámite de supervisión por parte del interventor municipal, primero, y del Ministerio de Hacienda, después. Echávarri ha instado al gabinete de Cristóbal Montoro a devolver el presupuesto validado o con correcciones lo antes posible, para que pueda llevarse a pleno entre febrero y marzo.
En parecidos términos se han expresado también los portavoces de las otras dos formaciones del tripartito, Miguel Ángel Pavón (Guanyar), y Natxo Bellido (Compromís), por lo que concierne a la aprobación del presupuesto.
El portavoz del PP, Luis Barcala, por su parte, también se ha referido a la planificación económica del Ayuntamiento para 2017 al asegurar que "el futuro de ese proyecto es el que ha querido el tripartito; se nos ha excluido de cualquier negociación y no se nos ha dejado ni exponer posibles propuestas, como sí ha ocurrido con otras fuerzas" en referencia a C's. "Somos el principal partido de la oposición y no se nos ha querido escuchar; pues bien, es lo que tienen, un presupuesto que pensamos que no es lo que la ciudad de Alicante necesita, y siendo así, no creo que podamos apoyarlo", ha adelantado. "Desde luego si sigue la misma línea que el de 2016, que se ha confirmado que es un desastre y que no lo han podido llevar a acabo, no lo vamos a apoyar", ha recalcado. Barcala ha insistido en que el PP en ningún caso se decantará por la abstención. "Abstenerse en la actual situación política del Ayuntamiento es lo mismo que votar que sí", ha aclarado. Y esa es una hipótesis que "por lo que conocemos de la propuesta del tripartito, que es lo que se ha publicado en los medios de comunicación, no contemplamos".
Sin el apoyo o abstención de C's o PP, el tripartito queda abocado a esperar hasta conocer cuál puede ser la posición de los dos concejales no adscritos, Nerea Belmonte (que no ha participado, este viernes, en el brindis navideño de la corporación, como tampoco lo ha hecho la portavoz de C's, Yaneth Giraldo, en principio, por motivos personales) y Fernando Sepulcre.
