El último encuentro celebrado entre los representantes de C's, el alcalde y la edil de Hacienda para abordar los presupuestos. Foto: PEPE OLIVARESGiraldo modula el rechazo frontal anunciado la semana pasada si el tripartito no asume su decálogo de medidas políticas y condiciona su posición al contenido definitivo del presupuesto, tras las correcciones del interventor y del Ministerio de Hacienda
ALICANTE. Ciudadanos (C's) deja todavía un resquicio abierto para desbloquear el presupuesto del Ayuntamiento de Alicante. Pese a la abrupta ruptura de la negociación registrada hace una semana, su portavoz municipal, Yaneth Giraldo, confirmó este miércoles, en declaraciones a Alicante Plaza, que su partido presentará como enmiendas las 29 modificaciones presupuestarias que ya dieron a conocer durante su último encuentro con el alcalde y con la edil de Hacienda, acompañadas de un decálogo de medidas de contenido político planteadas como requisito indispensable.
Como publicó este diario, esas variaciones preveían un recorte de más de un millón y medio en gastos de hasta 54 partidas, como la de gastos de Publicidad y Protocolo (con una disminución de 137.00 euros), la de Memoria Histórica (se aminora en 94.600 euros) o la de Comercio (141.800 euros menos), entre otras. Según Giraldo, si el tripartito acaba teniéndolas en consideración durante esa fase de enmiendas, "valoraremos qué decisión tomamos". Por lo pronto, dijo, "tenemos que evaluar si el equipo de Gobierno remite al Ministerio de Hacienda la misma propuesta que nosotros conocemos", una vez supervisada por el interventor municipal, "y cómo vuelve ese documento una vez revisado en Madrid", añadió.
Las matizaciones respecto a la posición anunciada el pasado miércoles (Giraldo dijo en una comparecencia pública respaldada por sus cuatro compañeros de grupo que su abstención sólo se produciría si el tripartito aceptaba todos sus requisitos: los económicos y los políticos) abren la puerta a que, finalmente, las cuentas puedan prosperar con más votos a favor que en contra, sin necesidad de que el tripartito tenga que esperar a conocer la posición definitiva de PP (que por ahora se decanta por votar en contra al haber sido vetados para formular aportaciones) y de los dos ediles no adscritos. Con la anuencia de C's, se evitarían los dos escenarios alternativos: la prórroga de las cuentas de 2016 y la posibilidad de forzar la aprobación del nuevo presupuesto mediante una cuestión de confianza.
La edil de Hacienda asegura que el tripartito estudiará todas las aportaciones, incluidas las del PP, cuando el proyecto quede aprobado en comisión
La edil de Hacienda, Sofía Morales (PSOE), abogó también este miércoles por la vía del entendimiento en la fase de enmiendas. No sólo con C's (sobre quienes ya valoró que podrían haberse aceptado sus sugerencias al menos en un 90%), sino también con el PP, "que siempre aportan propuestas interesantes", dijo. "Si las presentan, se estudiarán", añadió, en declaraciones a Radio Alicante. Sobre los dos no adscritos, Morales aseguró que "no rechazaremos su voto si es favorable" pero señaló que, en todo caso, le toca al alcalde, Gabriel Echávarri, decidir si se negocia o no con ellos. Eso sí, sostuvo que si los presupuestos de 2017 no se aprueban, la responsabilidad será del equipo de Gobierno "por no haber sabido explicarlos". En esta línea, volvió a destacar la importancia de algunas partidas, como los 21 millones de euros previstos para saldar deuda pública, los 50 millones destinados a Seguridad y Movilidad, los 45 para bienestar, los 27 para servicios, los 18 para servicios sociales, los 12,5 para cultura, o los 11 para educación.
Sea como fuere, Giraldo sí se mostró tajante respecto a otra de las iniciativas de su partido que se debate en el pleno de este jueves que, precisamente, también figuraba en el decálogo de requisitos: la petición de comparecencia del edil de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón (Guanyar), para que informe sobre las herramientas que se barajan con el fin de encajar la llegada de Ikea a Alicante. Giraldo instó al tripartito a "no obstaculizar" esa comparecencia dejándola en manos de una votación, como informó este diario. "Ellos que tanto alardean de transparencia, deberían de ser los primeros en dar explicaciones; las hemos pedido al alcalde y nos las ha negado; hemos pedido la convocatoria de la comisión sobre Ikea y no la han convocado; no nos han dejado otro camino que pedir la comparecencia del concejal de Urbanismo, que algo tendrá que decir sobre lo que se está pensando para Ikea", insistió. "No se trata de ir en contra de nadie, sólo queremos que nos informen de qué es lo que se está haciendo; las negociaciones con Ikea son como son pero queremos saber si se piensa a tramitar como un plan parcial o bajo qué formula", recalcó.
