ALICANTE. En Compromís hay sensación de cansancio de cómo van las cosas en el tripartito de Alicante. Lo hicieron patente tras la crisis generada por el cese de la cuñada del portavoz del PP, Luis Barcala, y ahora lo han plasmado en un documento que debatirá la ejecutiva local de la formación valencianista. En ese documento, la formación que lidera Natxo Bellido insta al PSOE -"al partido que le dimos la Alcaldía", dice textualmente- a iniciar un proceso de reflexión después de dos años de gobierno, ya que, a su juicio, "no hemos sido capaces de establecer las reglas del juego de un gobierno compartido, basado en la confianza y en la lealtad y una gestión de las discrepancias -propias de la pluralidad del gobierno- más sensata y alejada de las formas llamativas e impropias de la responsabilidad institucional que nos ha encomendado la ciudadanía". Y la muestra de ese hartazgo se visualizará hoy con la ausencia de los concejales de Compromís al acto de presentación del proyecto de peatonalización de la Explanada, que se presenta este jueves en el hotel Meliá. El miércoles, los socialistas tampoco acudieron al acto de presentación del Plan Ciudad, el plan estratégico de Alicante ideada por Compromís. El otro miembro del tripartito, Guanyar, sí que estuvo representado por Miguel Ángel Pavón.
Por todo ello, la ejecutiva de Compromís va a solicitar a todos los miembros del Gobierno municipal "actuar como un gobierno, cohesionado, que coordine mejor la gestión las áreas de gobierno y actúe de forma consensuada en las decisiones importantes para establecer una hoja de ruta del cambio". Y eso no se entenderá -añade el documento- si no se entiende que "las decisiones unilaterales están fuera de la dinámica y estabilidad de los gobiernos plurales, o si se actúan sin entender que gobernar implicar una asunción de responsabilidades bien diferentes a la labor de oposición".
Por todo ello, Compromís solicita la reunión de la comisión de seguimiento del pacto, del que esperan que acudan todos los partidos con sus máximos representantes y que entre los objetivos esté la convocatoria de una jornada de trabaja para establecer medidas para superar los problemas que hasta ahora han impedido la consolidación del cambio en la ciudad" y "variar la sensación de buena parte de la ciudadanía de estar asistiendo a una especie de cambio fallido en Alicante".
La coalición dice que ya no confía en las buenas palabras e intenciones. "Exigimos hechos", refleja el documento. Insiste en adoptar medidas para consolidar el cambio, como sí está ocurriendo en otras ciudades de la Comunitat, y lanza una advertencia: "La paciencia de la ciudadanía no es infinita, y la de Compromís, tampoco".