BENISSA. Se han cumplido las previsiones y el voto de Ciudadanos ha sido decisivo para que Abel Cardona, del partido Reiniciem, se convierta este martes el nuevo alcalde de Benissa, lo que pone fin a 18 años de gobierno del PP. Cardona ha recibido el respaldo de 9 votos: los tres de su partidos, Reiniciem -con más votos en la izquierda-, los tres del PSPV-PSOE, los dos de Compromís y el de Isidor Mollà, de Ciudadanos. El candidato del PP Arturo Poquet sólo ha obtenido los votos de sus 8 concejales.
La sesión se ha celebrado con mucho público, pero con apenas tensión. Una vez tomada posesión la nueva concejala del PP, que sustituye al alcalde dimisionario Juan Bautista Roselló, se ha producido la elección del nuevo primer edil. En la votación no ha habido sorpresas. Abel Cardona ha logrado la mayoría absoluta y ha recibido la vara de mando. Y después ya han comenzado las intervenciones de los partidos.
La primera, la del edil de Ciudadanos, Isidor Mollà, quien ha justificado su voto a Cardona por la necesidad de regenerar el ayuntamiento y hacer posible la alternancia política tras 18 años del PP en el poder. Mollà ha dicho que el nuevo alcalde tiene muchos retos, entre ellos, poner en marcha, el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) -anulado por los tribunales-; un plan estratégico para el municipio y poner en marcha la nuevas formas de hacer política, basadas en el diálogo y el consenso. Mollà se ha refirido a las presiones que sufrido en las últimas horas para permitir que cambiar su voto. "Una persona asalariada no lo habría soportado", ha advertido. Ha alertado a los más reacios al cambio que "mañana no pasará nada, que el sol volverá a salir", pero ha insistido en la necesidad de que haya una forma de hacer las cosas y de aplicar más transparencia y más consenso. Pero sobre todo, ha querido dejar claro que había que dejar paso a una nueva generación de políticos.
Compromís y PSOE han considerado que el proyecto del PP estaba agotado, que ya lo advirtieron en el pleno de investidura de junio de 2015, y que el actual equipo de gobierno del PP gestionaba el ayuntamiento dividido y sin rumbo. Todos ellos han destacado la generosidad de todos los partidos que ahora integran el equipo de gobierno, Reiniciem, PSPV y Compromís, a la hora de ceder en sus posturas iniciales.
El portavoz y candidato del PP, Arturo Poquet, ha lamentado que el gobierno resultante es un "pacto de perdedores", que va "contra lo que los benisseros eligieron en las urnas, que fue que el PP fuera el más votado, pero con diferencia, pues le otorgaron ocho concejales, a 99 votos de la mayoría absoluta". Poquet auguró poca estabilidad, pero pese a ello se ofreció al nuevo equipo de gobierno para brindarle su apoyo en los asuntos que sean beneficiosos para el municipio.
Por último, el nuevo alcalde, Abel Cardona, ha reconocido la etapa dura, por la cuestión económica y política que ha sufrido el país, que vivido el PP, pero sobre todo, le ha reprochado al gobierno saliente no haber dialogado y no haber aplicado las nuevas formas de hacer política. "Nunca han querido hablar con nosotros", ha dicho Cardona. El primer edil ha tenido palabras de agradecimiento para Mollà por su valentía a la hora de decantar al nuevo gobierno local y para sus socios de gobierno, PSPV y Compromís.
También incidido en que el futuro de Benissa será lo que quieran sus convenidos, por los que les ha conminado a ir al consistorio y hacer públicas sus reivindicaciones y aportaciones. "En Benissa ya no se deben decidir las cosas a puerta cerrada; hay que escuchar a la gente y ser más transparente", ha concluido el nuevo munícipe.