Fotos RAFA MOLINAALICANTE. Además de secretario general del PSPV provincial de Alicante, José Chulvi, alcalde de Xàbia, es el portavoz del grupo socialista. Con él analizamos la gestión de César Sánchez y la última propuesta de si equipo de gobierno de plantear un Fondo de Cooperación para los Municipios, condicionado a obras financieramente sostenibles, a diferencia de lo que propone la Generalitat, que transfiere el dinero a los ayuntamientos.
"No hubo vetos. A todas las partes se les dijo que no podíamos salir del congreso con imputados"
-¿Qué balance hace de estos dos años y medio de gestión del PP?
- Es un tiempo perdido, una oportunidad perdida de demostrar que la Diputación de Alicante como una institución capaz de poner los intereses de las personas y de los pueblos por encima de los municipios. Se ha querido marcar, en un primera etapa, un perfil de oposición frontal, total y absoluta las medidas del Gobierno de la Generalitat, que ha tenido que hacer frente a una hipoteca económica brutal, de 40.000 millones de euros, para una hipoteca reputacional que también ha pesado mucho. Y por desgracia, ha habido una institución que no ha acompañado. Ahora parece que cambia, que las formas cambian, que se quiera tender puentes e iniciar una etapa de diálogo. Llegamos tarde en algunas cosas. Por ejemplo, ahora hemos visto como, con el presupuesto no aparece el fondo de cooperación y eso algo que no podemos aceptar: los vecinos y vecinas de la provincia de Alicante se quedan con un fondo mutilado, sólo con el 50%.
"LA ETAPA DE CÉSAR SÁNCHEZ ES UNA OPORTUNIDAD PERDIDA DE DEMOSTRAR QUE LA DIPUTACIÓN ES UNA INSTITUCIÓN CAPAZ DE PONER LOS INTERESES DE LAS PERSONAS Y DE LOS PUEBLOS POR ENCIMA DE LO PARTIDOS"
-Das por perdido que el Fondo de Cooperación con los condicionantes que ofrece el PP, con las obras financieramente sostenibles...
-Es que no es un Fondo de Cooperación, es otra manera de repartirse el remanente de tesorería de la Diputación de Alicante. Le podrán llamar como quieran, pero no es el Fondo de Cooperación. No lo hay para 2018 a día de hoy. Presentaremos una enmienda, pero dudamos muchos que se acepte.
-Además del gesto del Fondo de Cooperación, que usted considera que no lo hay, observa algún gesto de cambio en el Gobierno de César Sánchez...
-A la vista del presupuesto, no lo hay. Han cambiado las formas, pero en el fondo, no. Hay una predisposición por parte de Presidencia de no aparecer como algo no tan beligerante contra el Gobierno de la Generalitat, pero también son los hechos, y no las palabras. Sí, uno puede rebajar el tono, pero si en el presupuesto todo sigue igual, o peor, se ve claramente que no hay voluntad clara que exista una colaboración institucional, que es la clave para que las cosas funcionen.
"Han cambiado las formas con la Generalitat, pero en el fondo, no. El presupuesto de Diputación es la prueba"
-En el tema del agua, ahora el PP está solicitando que las desaladoras tengan más potencia. ¿Qué le parece?
-Soy de un pueblo, Xàbia, que tiene desaladora, y es la mejor inversión que han hecho los vecinos porque esa la pagamos entre todos nosotros. El problema del agua no se arregla yendo a un sitio y haciéndose una foto. Se solventa sentándose y, de manera seria, planteando soluciones estructurales e integradoras de todos los recursos. Primero, ha que saber de qué se dispone, desalación, depuración, reutilización y trasvase, y ver qué soluciones integrales se pueden dar.
-¿La comisión provincial del Agua de la Diputación de Alicante sirve para algo?
-Bueno, tiene poca operatividad. Se podría hacer operativa porque hay representados todos los sectores, y eso es importante, pero hay que darle un contenido que vaya más allá de una análisis de la situación. El agua debe ser una cuestión de Estado. Lo dije en un pleno: si seguimos lanzándonos piedras, no vamos a solucionar nada a los agricultores, vecinos, etc. Insisto, debemos saber qué recursos tenemos y conjuntamente con las otras administraciones implicadas, elaborar una estrategia para ejecutarla de verdad. Ahora el problema acuciante está en la Vega Baja, pero no hay que olvidar que ya tuvimos problemas en la comarca que más llueve, la Marina Alta.
-La solución a los problemas del agua es ese plan que reivindica César Sánchez, de 10 millones, y para el cual reclama la ayuda de la Generalitat...
-No hemos visto ningún plan. Hemos visto un anuncio y unos números. ¿Por qué cinco millones, y no 10 y 10 millones? No hemos visto nada, no sabemos qué inversiones hay que hacer, ni qué se tiene que ejecutar de manera inmediata.
No estamos en contra de este tipo de ayudas, pero siempre y cuando esté debidamente justificadas
-¿Considera que el reparto de las subvenciones en la Diputación de Alicante se hace a la carta?
-Está claro que hay una serie de ayudas nominativas -específicas para un ayuntamiento en concreto- que no atienden a ninguna razón. Otras sí. No estamos en contra de este tipo de ayudas, pero siempre y cuando esté debidamente justificadas y salgan de una mesa donde se estudien las necesidades. Ahora bien, que sea para construir un campo de fútbol o un polideportivo, pues eso ya no se entiende. Para eso están los planes de obras, y cuando te toca, pues pides la ayuda. Los planes de obras y servicios, por ejemplo, se han sido aprobados por unanimidad. Esas ayudas no son justas y no dan una buena imagen de la Diputación de Alicante, y máxime cuando se está negando a repartir ayudas de forma objetiva dentro del Fondo de Cooperación Municipal. Tampoco considera a los ayuntamientos mayores de edad para que se gasten el dinero en lo que ellos consideran.
-¿La regla de gasto impuesta por el Gobierno es el principal obstáculo de los ayuntamientos para hacer su política?
-La regla del gasto es la gran piedra que tienen los ayuntamientos, sea del color que sean, sobre sus cabezas. Incluso la Diputación: presenta ahora un presupuesto de 216 millones de euros, con 216 millones en ingresos y 196 millones, que sí se pueden gastar. Salimos con 20 millones de euros que el señor Montoro no nos deja gastar. 20 millones de euros que perfectamente podrían ir al Fondo de Cooperación Municipal, los 13,7 que le corresponde poner a la Diputación, o los 20 millones al completo. Podrían, incluso, reprocharle a la Generalitat que ponen menos dinero. ¿Qué se tenga que cumplir la ley? Sí. Pero lo que no se entiende es que el PP no haya secundado nuestras mociones para solicitar el cambio de la regla del gasto. En un contexto de salida de la crisis, y con los ayuntamientos ya saneados, y que no nos dejen gastar el superávit, es duro y difícil de explicar a tus vecinos. Pero lo peor de todo es que Montoro no le deja a César Sánchez gastarse 20 millones de euros de su presupuesto.
"La regla del gasto es la gran piedra que tienen los ayuntamientos, sea del color que sean, sobre sus cabezas"
-Entonces, entiende el argumento del PP, que defiende que no hay Fondo de Cooperación por la regla de gasto...
-Sinceramente, le están tirando las culpas a Montoro de que no haya Fondo de Cooperación. Si Montoro quisiera, lo habría.
-¿Es una cuestión de Montoro o de voluntad política?
-Que desaparezca la regla de gasto, es una cuestión de Montoro, pero también del Congreso de los Diputados. Los diputados tienen una responsabilidad, no sólo el Gobierno. Una vez en la Diputación, yo vería voluntad en el PP si nos dijera que no puede poner los 13,7 millones que le corresponden a la institución, pero al menos dijeran que han conseguido incluir 8 millones en el presupuesto ordinario. O nueve. Sería una muestra de que si que quieren, pero no pueden, Pero no, te dicen no a las primeras de cambio: pues te condicionan con los remanentes del presupuestos, con las obras sostenibles y con unos criterios de reparto, que nosotros, el PSOE, podemos respaldar. Pero lo importante para los ayuntamientos es el Fondo de Cooperación, sin condiciones, que lo tenemos mutilado, porque sólo llega el 50% del dinero directamente a los ayuntamientos.
