ALICANTE. La posibilidad de que el Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) no se vaya a pronunciar sobre la solicitud de suspensión cautelar formulada meses atrás por Valencia, Hércules y Elche, para bloquear la obligación de pagar las sumas millonarias que les reclama la Comisión Europea, y entre directamente a valorar los recursos también interpuestos por los tres clubes supone, de entrada, que estos ganan tiempo.
El director general del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), Manuel Illueca, sorprendía el miércoles apuntando lo anterior como ya lo más lógico, dado el tiempo transcurrido sin que el TGUE haya fallado en ninguno de los procedimientos de medidas provisionales, algo que las partes han dejado entrever en las últimas semanas pero que ninguna se atrevía a asegurar en público. "No sabemos nada (sobre los recursos) pero sí entendemos que ya no tiene mucho sentido (por el tiempo transcurrido sin saber nada) seguir esperando una decisión sobre la cautelarísima por lo que ya iremos directamente a sentencia", decía el máximo responsable del banco del Consell.
Lo anterior abre un abanico de uno a dos años, que es el lapso de tiempo que se cree que puede tardar el Tribunal en resolver las tres demandas (Illueca también puntualizaba que no se van a acumular en un único procedimiento). Además, comoquiera que una vez haya fallo este se puede recurrir ante el Tribunal de Justicia y que los clubes no parecen dispuestos a aceptar otra cosa que no sea la estimación plena de sus demandas, habrá que sumar otro año más como mínimo...
En definitiva, un tiempo que en el caso del Hércules y el Elche es oro, dada su delicada situación económica y que sus primeros equipos militan en una categoría deficitaria.