ALICANTE. El Elche aspira a una rebaja de al menos el 50% en el importe de las cuotas inicialmente pactadas con la Agencia Tributaria, para dar salida a la deuda de más de 9,3 millones de euros que mantiene con ella tras el concurso de acreedores.
La entidad de la partida de Altabix llegó a un principio de acuerdo con el fisco que, afortunadamente, no se formalizó porque en el mismo se contemplaba como mínimo el abono de una entrada del 10% de la deuda (930.000 euros), más un 12% anual en cuotas mensuales (1.116.000 euros en 12 pagos mensuales de 93.000). Condiciones asumibles en Segunda División A pero no Segunda B donde los ingresos brillan por su ausencia.
Reunión en la Delegación Especial de València
Este miércoles, el secretario general del Elche, Juan Pascual (el presidente del club franjiverde se encuentra fuera de la ciudad esta semana) acudía a la Delegación Especial de la Agencia Tributaria en València para retomar unos contactos que quedaron interrumpidos por la delicada situación deportiva del equipo. Aunque el expediente del Elche obra en poder de la Dirección Regional de Recaudación, la realidad es que esta, como venimos contando, ha de seguir las instrucciones del Departamento de Recaudación de la Delegación Central de Grandes Contribuyentes, una unidad del fisco que no se caracteriza por su manga ancha con el mundo fútbol y cuya máxima responsable, Soledad García, es quien ha de dar el visto bueno al convenio singular con el club franjiverde.
Derechos de televisión y garantías
Los ingresos por derechos de televisión que le correspondían percibir en el fútbol profesional al Elche, aún en la división de plata, constituían una magnífica garantía para una Agencia Tributaria que cuando los clubes se retrasan en sus pagos cobra a través de la Liga. Ahora, desgraciadamente, la cosa ha cambiado para un Elche que sabe que habrá de garantizar su aplazamiento, es más, lo tiene por escrito ("garantías de las cantidades adeudadas") según reconocía a Alicante Plaza el pasado lunes el presidente del Elche Diego García que apuntaba a que lo normal es que Hacienda exija un aval bancario. No obstante, en el club esperan que el fisco atienda a la nueva situación socioeconómica de la entidad, aceptando rebajar el importe del primer pago, las cuotas mensuales y otras garantías que respalden un aplazamiento que sería de no menos de ocho millones de euros.
Otro partido más
Estamos ante otro partido más que juega fuera de los terrenos de juego un Elche que espera los pronunciamientos de la Audiencia de Alicante, para seguir avanzando en el convenio de acreedores aprobado por acreedores y juez. Mientras que el cumplimiento del acuerdo singular con la Agencia Tributaria no se puede suspender, de ahí la necesidad de negociar cantidades asumibles en Segunda División B, el convenio de acreedores o mejor dicho la Ley Concursal y el acuerdo con los acreedores ordinarios como reflejo de ella permiten la suspensión de las obligaciones que en el mismo se recogen por un máximo de dos años, algo a lo que el Elche se acogerá sin dudarlo.