ALICANTE. Y Darío 'Pippa' Benedetto marcó. El delantero argentino se estrenó este domingo como goleador con la camiseta del Elche, anotando un tanto que le bastó a su equipo para derrotar al Celta y sumar tres puntos importantísimos para lograr el objetivo de la permanencia.
Copropietario del club franjiverde (es socio de Score Club 2019, la sociedad titular del 99% de las acciones) y representado por el propio Christian Bragarnik, Benedetto recalaba en el Elche en el pasado mercado de fichajes de verano, en calidad de cedido (con una opción de compra) por el Olympique de Marsella, que es titular de sus derechos económicos hasta junio de 2023.
Contando con el choque de este domingo, con la camiseta franjiverde ha participado en 7 encuentros, concretamente ha estado sobre el verde 407 minutos. Tras el encuentro, Benedetto no escondía su satisfacción, tanto en lo personal como en lo colectivo: "Me sentí muy cómodo; siempre es importante no perder, pero en el fondo el empate no nos valía porque veníamos de dos derrotas muy duras. El triunfo era lo perseguíamos", decía el futbolista para, a continuación, reconocer "la confianza" que como delantero le da el marcar, "especialmente si sirve para sumar tres puntos".
Preguntado por su adaptación, Benedetto explicaba que era "consciente del club y equipo al que venía" y que trabaja en el día a día para avanzar en lo anterior, que se trataba de "un proceso largo", pero cada vez se iba a sintiendo "más cómodo" con el juego.
Errores a corregir
Bendetto abogaba por "pelear partido a partido, dejarse la vida para sumar en cada encuentro". El futbolista argentino sostenía que ese era el camino para alcanzar la permanencia, firmar encuentros de gran intensidad en ambas áreas.
Ahora bien, advertía que todavía tienen cosas que corregir, tanto en defensa como en ataque, como el acierto de cara a gol y es que este domingo dispusieron de al menos cuatro ocasiones claras para poner el 2-0 en el marcador y resolver el duelo por adelantado.
Crítico con el árbitro
Por cierto, el delantero franjiverde se mostró crítico con el árbitro, diciendo que "se equivocó muchísimo", al tiempo que apuntaba a "la subida de adrenalina" que vivió cuando el Celta empató y el árbitro dio en primera instancia el gol: "El partido lo teníamos controlado y la jugada era clara por lo que fue un alivio el ver que el árbitro iba a revisarla", señalaba.
