ALICANTE (EFE). Adrià Vilanova y Mohamed Ezzarfani 'Moha', nuevos jugadores del Hércules, han asegurado hoy en su presentación que llegar al equipo alicantino con el objetivo de ayudar a devolverlo al fútbol profesional.
Ambos jugadores proceden de la cantera del FC Barcelona y llegan por una temporada, si bien Vilanova es propiedad del Hércules y Moha en calidad de cedido.
El central, hijo del ex entrenador del FC Barcelona, Tito Vilanova, calificó como "ilusionante" el proyecto del Hércules e indicó que la gustó la ida de intentar "devolver al club a la categoría en la que, como mínimo, se merece estar".
"Es un equipo histórico, con buenos jugadores", señaló el defensa catalán, de 20 años de edad, quien dijo sentirse preparado para afrontar su primera salida de casa.
"El club confía mucho en mí y es una ciudad encantadora. De momento no he notado mucho el cambio", añadió Vilanova, quien se siente preparado para jugar en cualquier estilo de juego.
Moha llega al Hércules tras realizar la pretemporada con el filial del Barcelona. El jugador, fichado del Badalona, dijo afrontar "ilusionado" su cesión al equipo alicantino "para devolverlo a la categoría que merece".
El extremo, también de 20 años, agradeció el trato del club alicantino y dijo sentirse "el niño de la casa". "Estamos aquí para pelear por la titularidad y para jugar todo lo que se pueda", añadió el jugador marroquí, quien dijo estar en condiciones, como Vilanova, de debutar esta próxima jornada ante el Olot.
Ambos jugadores conocen bien el Grupo III y lo calificaron de "complicado", si bien indicaron que ven opciones de que el equipo pueda acabar primero.
Javier Portillo, director deportivo del Hércules, agradeció al FC Barcelona las facilidades que ha puesto para que ambos jugadores puedan acabar en el club alicantino y destacó que con su fichaje "damos un golpe en la mesa con los sub-23".