CASTELLÓ. Marie Claire afronta estos días uno de los momentos más complicados de su historia, en la que ha vivido varias crisis y transformaciones. A punto de presentar un preconcurso de acreedores, y con la necesidad inexorable de reducir la plantilla, ya de por sí mucho más exigua de lo que llegó a ser, los dirigentes de la centenaria textil castellonense están tratando de dar con la fórmula para continuar con su actividad, reducida eso sí, y evitar su extinción.
Con este objetivo su directiva está liderando una refinanciación de la deuda, en manos en su mayoría del Institut Valencià de Finances (IVF), que le prestó 21,5 millones en dos operaciones, pero también contraída con la Administración, proveedores y la plantilla, que sigue cobrando las nóminas y hoy mismo percibirá la de junio. Pero para lograr la supervivencia también es necesaria la entrada de un nuevo inversor.
Medias medicinales y stop carreras
En concreto, fuentes externas conocedoras apuntan que la cantidad de dinero necesaria ronda los 3 millones de euros. Se trataría de obtener con ellos los fondos necesarios para financiar la compra de material y mercaderías con los que impulsar las dos únicas unidades de negocio que tienen potencial para continuar en Vilafranca: las medias medicinales y las stop carreras, debido a que ambas tienen valor añadido que las diferencian en el mercado y los ingresos que se perciben por ellas permitirían seguir produciéndolas en la localidad dels Ports.