por la pandemia

Una aplicación web informa del aforo disponible en las calas de Benissa: vuelve a estar limitado

21/07/2021 - 

BENISSA, (EP). El Ayuntamiento de Benissa (Alicante) ha lanzado este año una aplicación web que informa sobre el aforo disponible en sus calas que debido a la pandemia han tenido que limitar su capacidad por segundo año consecutivo y que los usuarios puedan consultar a tiempo real la ocupación de cada playa.

Así lo ha explicado el alcalde de este municipio, Arturo Poquet, en declaraciones a Europa Press Televisión, quien cree que esta aplicación tecnológica, que está en marcha desde principios de julio, puede evitar el "descontento" que puede surgir entre los que acuden a visitar el litoral de esta localidad en temporada alta.

"Nuestras playas son pequeñas y contamos con poco aforo. El año pasado al tener que cerrar al público las calas sin previo aviso vimos que eso generaba cierto descontento entre los usuarios", ha señalado Poquet quien han recalcado la conveniencia de la implementación de esta 'app' gratuita para informar previamente a los usuarios si tendrán la posibilidad de acceder a estas calas con suficiente margen por si tuvieran que cambiar de planes.

Debido a la pandemia muchas de estas calas han tenido que reducir un 50% y 60% de su capacidad, algo que se hace más notable durante los fines de semana en los meses de verano que es cuando alcanzan la mayor afluencia de turistas.

"También evitamos que se junten grandes grupos de personas, que sean más núcleos familiares. Además siempre velamos porque haya una distancia que pueda mantener la seguridad en las playas", ha indicado Poquet quien cree que con esta aplicación da margen a los usuarios a informarse de la ocupación a tiempo real de cada cala.

Algunas calas de menor extensión tienen aforos restringidos a un máximo de 60 personas como la cala Advocat, y otras cuentan con una mayor superficie con la que pueden llegar a una ocupación de más de 200 personas. Es el caso de la cala La Fustera que tiene su aforo limitado a 250 usuarios.

Una vez se alcanza esta cifra, se procede al cierre tanto de los accesos para los bañistas como para los vehículos con una serie de señalizaciones hasta que se llega a reducir el aforo. Algo que impide a muchas personas poder llegar a disfrutar de estas playas.

Ante esta situación muchos bañistas madrugan para intentan evitar quedarse sin sitio, o bien evitan acudir a estas playas durante los fines de semana. "No tenemos que adaptar a las circunstancias del Covid", ha señalado una turista procedente de Andalucía quien ha asegurado que al igual que cuando viaja a otras ciudades madruga para poder hacer turismo, también le ha tocado madrugar en estas vacaciones para garantizarse un hueco en la playa.

"A quien madruga, Dios le ayuda. Si vienes pronto seguro que tendrás sitio, sobre todo los fines de semana que a partir de las 10:00 horas te puedes encontrar la cala cerrada", ha comentado uno de los informadores de la Generalitat Valenciana quien se encarga junto a otra compañera de controlar los aforos en la cala La Fustera, así como notificar cada hora el número de usuarios para actualizar la información disponible en la aplicación web del consistorio de Benissa.

Durante los días de entre semana las calas de Benissa suelen alcanzar el límite de su aforo a partir del mediodía, algo que ha sorprendido a un grupo de amigas procedentes de Oliva (Valencia) quienes no se esperaban encontrar tanta dificultad para aparcar y poder tener un hueco en la playa: "Si la cala está así un miércoles no me quiero imaginar un domingo".

"La gente huye de las grandes playas de arena"

Desde el Ayuntamiento de Benissa se muestran esperanzados en que una vez termine la pandemia puedan recuperar sus aforos que han tenido que ver limitados por la pandemia. "Nos hemos tenido que adaptar pero esta afluencia de personas interesadas en nuestra calas nos informa de que es un destino turístico que los usuarios han elegido", ha comentado el alcalde es esta localidad.

En su opinión, hay una tendencia cada vez mayor de personas que se "refugian" en estas pequeñas calas y "huyen de grandes playas de arena kilométricas" que pueden estar más "masificadas" en los meses estivales: "Prefieren estas playas con menor afluencia de personas y donde es más sencillo controlar aforos, accesos y la distancia de seguridad".

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