ALICANTE (EP). Los profesores Andrés Pedreño y Luis Moreno, autores de 'Prevenir el declive en la era de la Inteligencia Artificial. Europa frente a EEUU y China', piden a Europa en su nueva obra que desarrolle un impuesto que garantice la libertad de prensa y la supervivencia de los medios.
La idea que defienden en su ensayo reclama la creación de un tributo, del que esbozan un primer borrador, que permita la supervivencia y protección de los medios de comunicación ante la aparición de "fondos oportunistas o terceros países que pondrían en riesgo su transparencia".
"Europa debe liderar un modelo normativo para garantizar la libertad de prensa en la era digital, porque el derecho al periodismo sin limitaciones ni coacciones es vital para nuestras democracias, y hay que defenderlo cueste lo que cueste", insisten.
La publicación también pone el foco sobre el retraso digital de Europa y España y las consecuencias "muy negativas" en las que esto se traduce. A su juicio, "una Administración farragosa y excesivamente proteccionista está haciendo perder una carrera fundamental que pone en peligro la sociedad de bienestar de millones de ciudadanos".
Los autores lamentan que la crisis de ventas "no parece tocar fondo" y que, pese a que los medios han intentado paliar la situación con un cambio de negocio y con el rescate de los gobiernos con compras institucionales, estas medidas son "insuficientes".
En este primer borrador del impuesto que plantean avanzan que la materialización de esta propuesta requeriría una elevada dotación de fondos por lo que se podrían crear nuevos impuestos sobre actividades de ocio, grandes empresas con volumen de negocio superior a los 100 millones de euros al año o industrias con elevado impacto medioambiental o climático.
También detallan que el impuesto debe ajustarse en su volumen recaudatorio a las necesidades fiscales de los medios para asegurar su solvencia. "La ley debería prohibir cualquier fondo opaco, con criterios no menos restrictivos que cuando se refiere a la financiación de los partidos políticos", añaden.
En esta línea, matizan que las ayudas financieras deben otorgarse en función de indicadores objetivos, como el número de usuarios o el tráfico que genera el cuerpo de informaciones estrictamente relacionadas con la libertad de prensa y opinión.
Insisten, por último, que en un contexto de difusión en redes sociales y de la irrupción de las 'fake news', es necesario el desarrollo de un periodismo de calidad y la libertad de prensa, "garantizando una financiación suficiente, transparente y alejada de intereses espurios".
