David Edge mostró sus galones en el escenario. Fotos Loles&PuigASPE. El festival Aspesuena se está convirtiendo en un clásico entre los festivales de música indie que inundan la provincia de Alicante durante las calurosas noche veraniegas, un evento gratuito con un cartel en su presente edición más que atractivo para que el Auditorio Alfredo Kraus, lugar donde en ésta ocasión se celebraban los conciertos, luciera un fantástico ambiente con 2.000 almas, ávidas de música, baile y diversión.
Después de la fiesta de tardeo en la aspense Plaza de San Juan con DJ Toño y DJ Brufal , el primer concierto nos dejaba a todos en estado de shock; Rufus T. Firefly traían su proyecto Magnolia (Largo Naranja, 2017) con el que están girando por todo el territorio nacional, sin duda uno de los discos del año en nuestro país, con un "directo" demoledor; repleto de sonidos envolventes y explosivos y un mensaje dulce, tierno y esperanzador.
La banda de Aranjuez dejó el listón muy alto para el resto de grupos y dejó la impronta de ser una de las formaciones que veremos en los festivales más importantes de nuestro país.
Rufus T Firelly, la gran sorpresa de la noche.A continuación fue el turno para otra de las bandas que pasan por uno de los momentos más dulces de su carrera, Nudozurdo, nos presentaron en vivo su último trabajo Voyeur Amateur (Mushroom Pillow, 2017).
El trío madrileños dejó otro gran concierto con otro de los discos más importantes de éste 2017 con composiciones sinfónicas que crean una atmósfera donde público y banda son uno como en Bondage Belcanto, un tema instrumental de larga duración soberbio.
Uno de los grandes atractivos de la 6ª Edición del Aspesuena fue presenciar el concierto de los británicos The Wedding Present, sin duda uno de los grandes nombre indie de la década de los 80s. Los de Leeds se encuentran acomodados en una segunda juventud reactivada por el eterno David Gedge.
Giran por España para participar y promocionar en el Deleste Festival de València. Más de 30 años avalan a ésta banda que aportaron el punto internacional al festival y dejaron muestra de lo que son capaces de hacer sobre el escenario sin bajar el pie del acelerador durante todo el concierto a través de su último trabajo Going, Going... Todo intensidad: guitarras altas y muchos recuerdos a Los Planetas.
Los encargados de amenizar entre concierto y concierto la espera fueron Yiorch y Todoindie DJ Set sin dejar respiro a la gente que aprovechaba para refrescarse en la barras habilitadas para la ocasión.
Luis Brea y el Miedo llegó, vio y triunfó: posiblemente el concierto más esperado de la noche donde el público se lo pasó en grande disfrutando de su reciente trabajo Usted se encuentra aquí (Hook, 2017) repleto de influencias “nueva oleras” y otros géneros como el power-pop y mucha mezcla de canción melódica con letras costumbristas y urbanas.
Clásicos como Mil razones, Automáticamente o El verano del incendio se mezclaron en el repertorio con otros más actuales como Perfecto, Nueva Generación, Manuel Rodríguez o Como una ola.
Terminando el concierto Luis Brea dejó el escenario y bajó al cemento, entre el público, para poner el colofón a un concierto que fue divertido y desinhibido desde el principio.
El último show del festival sería para otro de los platos fuertes de la noche, Amatria. Los temas más bailables y electrónicos de la noche fueron responsabilidad del proyecto de Joni Antequera, flanqueado por Pablo Lastra (batería) y Juan Rodo Utah (guitarra/bajo).
El concierto alcanzó su toque álgido con la célebre y conocida Chinches: aportó buen ambiente y diversión para cerrar un festival donde gracias al esfuerzo de un pequeña localidad del Vinalopó ofrecen un producto de calidad y gratuito; la música es cultura, algo de los que otros muchos deberían tomar nota.
Luis Brea se vino arriba y bajó al cemento a compartir emociones con el respetable.
