La secretaria general de la Fesp-UGT en la sede del sindicato en València. Foto: MARGA FERRER VALÈNCIA. La posibilidad de que la Conselleria de Hacienda, Economía y Administración Pública pueda suprimir o reubicar la recién creada Escuela Valenciana de Administración Pública (EVAP) bajo una dirección general ha despertado malestar y preocupación a partes iguales entre los sindicatos. En particular, este viernes la federación de Serveis Públics de UGT advertía que esto supondría un "grave error y un paso atrás en el camino hacia la modernización de las administraciones públicas valencianas, al tiempo que dinamitaría la nueva Ley de Función Pública".
El sindicato apunta que la EVAP es un organismo autónomo de carácter administrativo, por lo que se trata de "un apéndice de la Administración de la Generalitat y no de un ente del sector público instrumental que debe estar integrada por personal funcionario y en ningún caso de personal eventual". En concreto, se trataría de personal procedente del actual Instituto Valenciano de Administración Pública (IVAP) y del servicio de selección, entre otros.
En este sentido, defienden que su puesta en funcionamiento no supondrá "ni un incremento presupuestario ni duplicidades", puesto que más allá de "profesionalizar la función pública, da transparencia e independencia a los procesos selectivos del personal y de los tribunales". Y ante la posibilidad de que sus competencias pudieran reubicarse bajo el paraguas de direcciones generales, subrayan que el diseño de la EVAP "implica que sea un consejo rector y no una dirección general (más sensible a los criterios políticos) el que se encargue de la toma de decisiones". "Ello implica una fiscalización y una vigilancia para evitar arbitrariedades", añade el sindicato.
Entre las competencias de la EVAP, figura la formación, la selección (que incluso podría abarcar a las administraciones locales y al sector público instrumental) y la investigación en materia de administración y gestión pública. Bajo su tutela se encuentran también cuestiones relevantes como la carrera profesional, la evaluación del desempeño, las bolsas de trabajo temporal, la promoción y la provisión de puestos.
Si bien la decisión no está ni mucho menos adoptada, lo cierto es que existe preocupación entre los sindicatos. La consellera del ramo, Ruth Merino, mencionó la EVAP en una reciente entrevista en À Punt como uno de un organismo cuyas funciones antaño eran ejercidas por una dirección general, por lo que deslizaba la intención de su gobierno de rediseñar la estructura actual. Sin embargo, UGT denuncia que esta fue fruto de un acuerdo consensuado con los agentes sociales y acordado en la Mesa General de Negociación".
Asimismo, consideran que su eliminación dejaría a la Administración de la Generalitat a la cola de la modernización respecto a otras autonomías. "Otras comunidades autónomas (Andalucía, Cataluña, País Vasco, etc.) tienen organismos similares, herramientas que se han demostrado muy exitosas para adaptar las administraciones a las necesidades de la sociedad actual", sostienen tras reclamar un encuentro con la consellera.
