VALÈNCIA (EFE). La flota pesquera valenciana, al igual que la del resto de España, permanecerá amarrada hasta el próximo miércoles, cuando los responsables de la Federación Nacional de Cofradías tienen previsto mantener un encuentro con el ministro de Agricultura, Luis Planas, para reclamar ayudas por el incremento del precio del combustible.
Según ha informado a EFE Vicent Pérez, presidente de la Comisión Interfederativa de Cofradías de Pescadores de la Comunitat Valenciana y de la Cofradía de Cullera (Coincopesca), el paro afecta a cerca de 600 barcos entre arrastreros, de cerco y artesanales.
"Permanecerá así al menos hasta el miércoles. Y si no se logra nada seguiremos parados, porque para ir a trabajar al mar y no sacar ni el jornal, no saldremos. El problema principal que tenemos es el precio del gasoil", lamenta.
Pérez duda de que estos paros tengan un impacto relevante e inmediato sobre el consumidor general. "Si vamos a una gran superficie seguramente veremos el puesto lleno de pescado, del que traen de fuera, porque pasa como con las naranjas, que las de aquí se quedan en el árbol, pero pescado de nuestra costa en las lonjas no habrá".