BIAR. Un par de biarenses, apasionados por la alimentación saludable y por fomentar el producto de la tierra han creado un proyecto para conseguir una alimentación más sana en el mundo de los snacks: The Food Beat. Y, además, para este proyecto han conseguido que toda la producción se lleve a cabo en Xixona, para que "todo quede en la terreta". Silvia Castelló, dietista-nutricionista y co-fundadora, junto a Pablo Amorós, son los creadores de esta startup de alimentación saludable.
The Food Beat es una startup de alimentación saludable que ha nacido, precisamente, según explica Silvia Castelló, de las "ganas de revolucionar la industria alimentaria y los hábitos alimentarios de la gente con mis conocimientos y experiencia como dietista-nutricionista y la fuerza innata de Pablo para impulsar proyectos relacionados con el bienestar y la salud". Así, se han marcado un objetivo principal con The Food Beat es dar alternativas saludables a los snacks que más frecuentemente se encuentran en el mercado y que suelen ir acompañados de azúcares añadidos, exceso de sal, grasas de mala calidad e incluso potenciadores de sabor.
De este modo, Keruak se ha convertido en su primer producto, un snack en formato barrita. "La realidad es que prototipamos Keruak en nuestra propia cocina, prueba-error hasta que dimos con las combinaciones perfectas", asegura la co-fundadora de esta startup. De ahí y -admite- casi sin pensar que se pudiese materializar, finalmente lograron dar con un obrador que les ayudó a trasladar todo lo que habían hecho en casa con una picadora a cantidades "más grandes" y hasta hoy.
"La barrita "Keruak" se inspira en el dinamismo y espíritu revolucionario y explorador de Jack Kerouac, el novelista que dicen escribió su obra icono "En la Carretera" en menos de tres semanas, y cambió la forma de pensar de toda una generación a través del movimiento Beat. Un auténtico movimiento anti Statu Quo y contra el tradicionalismo de la época, una nueva manera de vivir", afirma Silvia Castelló.
¿Y qué las hace diferentes? Cada una de las barritas no contiene más de cuatro ingredientes entre los que están únicamente las frutas desecadas, los frutos secos y las especias como por ejemplo, la canela. Nada más. Existen cuatro sabores: Cacao, Apple, Peanut y Pistacho. "Parte de nuestro impulso es potenciar una alimentación saludable pero también pensamos en lanzar un producto alineándonos a los cambios que cada vez están cogiendo más peso en la sociedad" apuntan los creadores de The Food Beat. Tanto el veganismo, alineado a la sostenibilidad y transparencia de las organizaciones, como la conexión continua y dinamismo de los actuales estilos de vida laboral y personal.
Como curiosidad, asegura Castelló, la producción se hace en Xixona -la cuna del turrón- y los fabricantes se quedaron sorprendidos cuando les propusieron hacer snacks sin azúcar ni miel. Pero tras la sorpresa inicial, el paso ha dado sus buenos frutos. La sinceridad es también parte de este proyecto: "Esto no va de barritas sustitutivas o de vender 'la panacea' de nada, no se trata de un producto mágico ni vamos a venderlo con slogans del tipo 'potencia tu creatividad', 'te prevendrá de enfermedades' o 'superalimentos para tu día a día'", mantienen los creadores.
Los biarenses definen a su primera barrita, Keruak como: simple, porque solo tiene cuatro ingredientes reales. También como raw, con un proceso de elaboración muy básico con materias primas naturales; plant-based, porque es la primera gama de barritas española completamente vegana y de kilómetro 0, porque se produce en la provincia, en Xixona, donde existe un importante conocimiento en la producción de productos alimenticios.
Además, han querido ofrecer un producto fácil de consumir, porque está pensado para comer en cualquier lugar, principalmente en momentos de trabajo, viaje o deporte y, aportan, "delicioso" porque han elegido "una palatabilidad única y muy natural".
"Entramos en el sector de barritas ya que nos dimos cuenta que había una oferta tremendamente extensa de productos de muy poca calidad nutricional y, además, ninguna de ellas contaba una historia, no han creado un vínculo con su consumidor". Silvia Castelló y Pablo Amorós se lanzaron, así, al mundo emprendedor con Castelló como la principal abanderada y cara visible del proyecto. "Me di cuenta de que para ser emprendedora se necesita capacidad de resiliencia ya que aunque tu idea sea innovadora, es dificilísimo hacerse visible más aún en este sector en el que la industria alimentaria tiene tanto poder y alcance". Aún así, admite la co-fundadora, cree que cuando se visualiza el objetivo "ni siquiera hacer el lanzamiento de la tienda online en plena pandemia del coronavirus nos puede frenar".
El proyecto se empezó, no obstante, hace más de un año, presentando el prototipo que sería definitivamente Keruak, "organizandonos con la app Trello para dividirnos las tareas y con un planning de negocio básico. Nuestra inversión fue poco más de 10.000 euros de nuestros propios ahorros, y muchos fines de semana y noches sin dormir".
Justo un mes después de su lanzamiento, tanto de anera online como a través de algunas tiendas físicas, han logrado distribuir unas 4.000 barritas. "Planeamos vender durante junio y principios de julio unas 10.000 unidades más. Sabemos que hay una demanda de snacks saludables en el mercado, y la vamos a suplir. Nos vemos como los sucesores de los snacks actuales, dando al sector una nueva vuelta de tuerca, volviendo al semi-procesado saludable con ingredientes reales", aportan desde The Food Beat.
Desde esta startup están convencidos que "estamos aquí para cambiar los hábitos alimentarios de la gente y revolucionar la industria alimentaria para siempre", y ese es el propósito que les ha hecho empezar.