Misteri d'Elx / RAFA MOLINAELCHE. La Junta Rectora del Misteri d’Elx ha decidido, tras la reunión telemática celebrada esta tarde, suspender las representaciones de La Festa del mes de agosto con el objetivo de garantizar la seguridad de los cantores, de los operarios y operarias que participan en las representaciones y de los ilicitanos e ilicitanas en general.
Para los miembros de la Junta Rectora, las condiciones en que se desarrolla el drama asuncionista hacen imposible garantizar la distancia de seguridad necesaria en este contexto de pandemia. Por una parte, las representaciones cuentan con una masiva afluencia de público que hacen inviable su escenificación con asistencia de la ciudadanía. Pero, además, señalan que "se hace imposible celebrar el Misteri d’Elx incluso a puerta cerrada, dada la cercanía que existe entre cantores y operarios, especialmente en los que se ubican en las tramoyas aérea y terrestre".
En este sentido, el presidente ejecutivo, Francisco Borja ha señalado que "con todo nuestro pesar tenemos que comunicar la imposibilidad de celebrar el Misteri d’Elx este agosto, pero estamos convencidos de que es la mejor decisión que podemos tomar desde el punto de vista de la salud pública y la seguridad de la ciudadanía".
Borja ha destacado que "conscientes del valor cultural, histórico y religioso de La Festa, la anulación de la escenificación no va a afectar a la labor de difusión que esta Junta Rectora ha marcado como prioritaria y, por supuesto, también va a continuar la labor de formación de la Capella, Escolanía y Coro Juvenil por medios telemáticos".
A ese respecto, señala que "La Junta Rectora, el Patronato Rector, el mestre de capella, los cantores, los trabajadores y todo el personal que hace posible el Misteri d’Elx, vamos a continuar esforzándonos para salvaguardar nuestro Patrimonio de la Humanidad y seguir aumentando su divulgación", ha asegurado el presidente ejecutivo, quien ha añadido que "estamos convencidos de que la festa del poble d’Elx volverá a celebrarse con toda su fuerza una vez superada esta crisis sanitaria".
Asimismo, Francisco Borja ha querido transmitir "el profundo dolor que nos embarga por esta pandemia, por lo que queremos expresar nuestro cariño y apoyo a las familias y amigos de los fallecidos tanto en Elche, nuestra querida ciudad, como en España y el resto del mundo, y queremos también desear una pronta recuperación a todos los enfermos". Por su parte, el alcalde de la ciudad y presidente efectivo del Patronato y de la Junta Rectora, Carlos González, respalda esta decisión, “muy complicada y difícil por lo que el Misteri supone para el pueblo ilicitano y porque solo en muy pocas ocasiones a lo largo de la historia ha dejado de representarse”.
González entiende, como ha expresado en sucesivas ocasiones desde que se declaró la pandemia, que “lo prioritario es preservar la salud de todos los ilicitanos e ilicitanas y recuperar la normalidad de la vida cotidiana con las mayores garantías sanitarias”. El alcalde siente y comprende “la enorme desazón por esta suspensión no solo de la amplia familia del Misteri sino de todo el pueblo de Elche, que tiene La Festa como indiscutible seña de identidad y que cada mes de agosto se vuelca en la basílica de Santa María con las representaciones de esta joya histórica, Patrimonio de la Humanidad desde 2001”.
Carlos González ha querido tener también palabras de ánimo para las numerosas personas que año tras año, desde tiempo inmemorial, hacen posible la singular representación y destaca tanto su compromiso personal como el del Equipo de Gobierno para garantizar su continuidad, su pervivencia en el tiempo y su divulgación. “La Festa es un tesoro cultural que nos hace sentirnos profundamente orgullosos de ser ilicitanos”, declara el alcalde.
Sobre las representaciones extraordinarias previstas en el mes de noviembre, la decisión se tomará más adelante, teniendo en cuenta la evolución de la pandemia y las normas dictadas por el Gobierno para contener el avance de la enfermedad COVID-19.
Cabe recordar que no es la primera vez que tiene que anularse La Festa por causas de fuerza mayor. En el siglo XIX ya tuvo que suspenderse por la epidemia de cólera. Entre 1904 y 1905 no se celebró por obras en la cúpula de Santa María y en el periodo entre 1936 y 1940 tampoco hubo representaciones por la Guerra Civil y la posterior restauración de la basílica. Asimismo, hay que señalar que la Junta Rectora está formada por la Generalitat, el Ayuntamiento de Elche y la Iglesia Católica, por lo que la decisión tomada hoy, con unanimidad de sus miembros, cuenta con el respaldo de todas estas instituciones.
