VALÈNCIA. La Conselleria de Sanidad ha contratado a Ascires (Eresa), Sistemas Genómicos -dependiente del mismo grupo- e Imed para realizar las pruebas PCR a escolares ante la saturación de la Atención Primaria. Así lo confirman desde el departamento de Ana Barceló, donde explican que se han seleccionado a tres compañías, una para cada provincia, con el fin de reducir el tiempo de espera de dichas pruebas.
Aunque desde la conselleria no han especificado quiénes son las compañías, este medio ha podido saber que son las empresas anteriormente mencionadas quienes están ejecutando este 'plan de choque' ante el desbordamiento por pruebas de los centros de salud en las últimas semanas. Un trabajo que asumirá Ascires en Castellón; en Valencia Sistemas Genómicos, mientras que IMED abarcará las pruebas en Alicante. Una decisión que se ha tomado ante una situación creciente de casos que este lunes llegaba a su máximo desde febrero con 5.820 positivos.
Los padres están siendo avisados sobre la citación en un SMS, donde se especifica la hora y el lugar de la prueba. No obstante, empezaban a generarse las primeras quejas al establecer un plazo de contestación del resultado en 48 horas, lo que implica que para algunos afectados no lleguen antes de los días festivos. Según los últimos datos, publicados el pasado lunes, las autoridades sanitarias habían determinado el confinamiento de 444 grupos de 225 centros educativos, con las consiguientes PCR.
No es la primera vez que Sanidad recurre a empresas privadas para abordar con brío la realización de pruebas para detectar el coronavirus en escolares. Ya lo hizo en febrero de este mismo año, donde también contrató a Sistemas Genómicos por procedimiento de emergencia y sin expediente de contratación. Concretamente, un contrato de 500.000 euros para la realización de 10.000 pruebas PCR en el estudio de contactos de los casos detectados en el ámbito escolar.
En dicha ocasión, la filial de Ascires cobró de la administración 50 euros por cada prueba realizada, incluida la recogida de muestras, un precio superior al ofrecido por algunos laboratorios a los que Sanidad pidió una propuesta.
