Hoy es 22 de noviembre

los socialistas presentarán una enmienda para bonificar a las empresas familiares que facturen más de 10 millones

Podem tilda de "desleal" la rebaja de Sucesiones de Puig y Compromís se niega a apoyarla

Foto: KIKE TABERNER
3/11/2022 - 

VALÈNCIA. La idea de que el PSPV quiera enmendar la ley para bonificar al 99% el Impuesto de Sucesiones para la transmisión de todas las empresas familiares que facturen más de 10 millones de euros no ha sentado bien en Compromís, pero menos aún en Unides Podem. No ha agradado ni el fondo, la medida, ni la forma, dado que ambos desconocían que su socio en el Botànic estaba preparando una enmienda a la Ley de Acompañamiento de 2023 al margen de ellos y se enteraron por la exclusiva publicada este miércoles por Valencia Plaza

La lista de factores por las que el cabreo es mayúsculo es larga, pues la noticia llega después de haber cerrado un acuerdo sobre fiscalidad en el Consell al que ha costado semanas por las diferencias que existían entre las tres fuerzas. Un pacto que el Botànic ha logrado encajar gracias a una ensalada legislativa -ha hecho falta un decreto-ley, la Ley de Medidas y la Ley de Presupuestos- para plasmar sobre el papel los compromisos fiscales que el president de la Generalitat, Ximo Puig, adquirió en tribuna en el pasado Debate de Política General


La discusión por la rebaja del Impuesto de Sucesiones, según reconocen fuentes de ambas formaciones, ya se tuvo en el seno del Gobierno y quedó descartada porque no existía forma de llegar a lugares comunes entre las tres fuerzas. Compromís y Unides Podem no consideran que una empresa que facture más de 10 millones de euros al año pueda considerarse "familiar", sino que para ellos es una sociedad de gran tamaño. "No estamos hablando de alguien que hereda una zapatería", expuso este miércoles en rueda de prensa el diputado de Unides Podem, Ferran Martínez. En su opinión, sería una "deslealtad" por parte del PSPV presentar esta enmienda después de todo. 

El diputado fue más allá y puso sobre la mesa que el Reglamento de Les Corts establece en su artículo 118.1 que cualquier enmienda que se presente a un proyecto de ley y afecte a las cuentas autonómicas de manera que suponga una disminución de ingresos, "requerirán la conformidad del Consell para su tramitación". Un trámite en el que sus dos consellers, Héctor Illueca y Rosa Pérez, aseguró, se situarían en contra porque no piensan dar el visto bueno a esta medida.

Foto: KIKE TABERNER

Ahora bien, la unanimidad o no en el seno del Gobierno tampoco sería necesaria para que esta enmienda pudiera prosperar o tramitarse en Les Corts, dado que el artículo 118.4 de la Cámara señala además que el Consell podrá manifestar su disconformidad con la tramitación de enmiendas que supongan un aumento de los créditos o disminución de los ingresos presupuestarios en cualquier momento de la tramitación". Pero en ese caso de discrepancia, sería la Mesa del Parlamento la que resolvería si la iniciativa se debate y, dado que el PSPV contaría con el apoyo de PP y Ciudadanos, la enmienda continuaría su tramitación sin demasiados contratiempos.

De hecho, los socialistas piensan sacar adelante esta modificación del Impuesto de Sucesiones con el apoyo de sus socios o sin él, pues para ello tan solo bastaría el apoyo de la oposición. Y huelga recordar que el Partido Popular de la Comunitat Valenciana y Cs han presentado año tras año esta enmienda, por lo que son favorables a esta reforma. Tanto es así, que ambas formaciones avanzaron este miércoles en rueda de prensa que este año volverán a presentar esta enmienda. Los populares, además, para bonificar al 99% este impuesto a todos los ciudadanos, independientemente del tamaño de la empresa que se trate. 

Compromís, a la espera

El tono de Unides Podem distó especialmente del que empleó la coalición valencianista. En Compromís también impera el cabreo por lo que tildan como una "jugarreta" del PSPV, pero en público son más prudentes a la hora de valorar la iniciativa que sus socios piensan defender en solitario. El diputado Carles Esteve descartó que fuese necesaria la bonificación para dar "regalos fiscales a grandes patrimonios" y el portavoz adjunto Vicent Marzà añadió que si sus socios creen que ahora mismo esta es la mejor opción, lo deberá "explicar a su electorado y después buscar el acuerdo con partidos que puedan apoyarlo", entre los que excluyó a su grupo parlamentario. 

Los valencianistas, que durante la negociación de los Presupuestos amenazaron con poner sobre la mesa la tasa al azúcar si los socialistas resucitaban el Impuesto de Sucesiones, leen esta maniobra del PSPV como una estrategia electoral para captar votos del centro-derecha y "desmovilizar la derecha económica". Un planteamiento que entienden que es necesario que el electorado conozca para situarse y que creen que podría beneficiar a Compromís si lograsen captar el voto de centro-izquierda que los socialistas pueden perder por políticas de este tipo. 

De esta manera, la intención es no abrir una guerra con el PSPV ni elevar el tono como ha hecho Unides Podem y, cuando se acerque el momento de presentar las enmiendas parciales, tratar de negociar una salida intermedia para mantener unido el Botànic. Pero si el acuerdo fuera imposible, dejarían que los socialistas "se retraten votando de forma conjunta con el PP". Una imagen que, consideran, podría tener un efecto negativo para sus socios, especialmente con la cercanía de las elecciones autonómicas. 

Por el momento, la síndica del PSPV, Ana Barceló, avanzó este miércoles que su grupo recabará los apoyos necesarios para que la enmienda "salga adelante". La portavoz no pudo cuantificar su efecto en la recaudación pero sí garantizó que este sería "mínimo".

La bonificación actual

El texto validado en diciembre de 2019 y que entró en vigor el 1 de enero de 2020 recoge tres tipos de supuestos. En primer lugar, una bonificación del 99% en las transmisiones de "empresa individual agrícola a favor del cónyuge, descendientes, adoptados, ascendientes, adoptantes y parientes colaterales hasta el tercer grado". Eso sí, siempre y cuando el heredero mantenga el patrimonio un mínimo de cinco años. En este caso, no existe límite de facturación.

El segundo supuesto, afecta a aquellas empresas individuales o de "negocio profesional a favor del cónyuge, descendientes, adoptados, ascendientes, adoptantes y parientes colaterales hasta el tercer grado". Es decir, a aquellas transmisiones de negocios tales como, por ejemplo, un despacho de abogados también se les aplicará una reducción del 99% a la base imponible del Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Y los requisitos para que se aplique esta bonificación son los mismos que en el caso anterior: que el adquiriente mantenga la actividad por un periodo de al menos cinco años. 

El tercer caso afecta a las empresas con participaciones, supuesto en el que se ha mantenido el redactado original: se bonificará el 99% siempre y cuando la entidad facture menos de 10 millones de euros al año. En caso de fallecimiento, los importes varían dependiendo de si el propietario que va a dejar el legado a sus herederos estaba jubilado de la actividad en cuestión. En el caso de haber cumplido los 65 años, la bonificación será del 99%; sin embargo, será del 90% si éste tiene entre 60 y 64 años cumplidos, como ya ocurre en la ley actual. Una situación que se replicaría en el caso de transmisiones inter vivos.

Noticias relacionadas

next
x