VALÈNCIA. El choque empezó a las cinco y media de la tarde del sábado con la normalidad habitual de cualquier partido del Grupo 3 de la categoría Regional Preferente Cadete. Sport Base Ontinyent recibía en casa al UD Alzira ‘B’: el segundo recibía al tercer clasificado. Un buen partido para disfrutar desde la grada. En el minuto 7, los visitantes se adelantaron por medio de Raúl Sánchis. Todos corrieron a celebrar el tanto del goleador alcireño, incluyendo al capitán del equipo, Nacho Barberà.

Minutos después, al ‘capi’ se le paró el corazón y cayó desplomado al suelo. Los intentos por reanimarle no tuvieron éxito. Parada cardíaca, según los primeros diagnósticos desde Ontinyent. Muerte súbita. Nacho, de la generación de 2003, sólo tenía 14 años.

Algunos de sus compañeros le llamaban ‘Cholo’, como se pudo leer en algunos los mensajes de adiós por parte de centenares, miles de personas e instituciones a lo largo de la noche del sábado, una vez la UD Alzira comunicó su triste final. Era un líder natural, todo un gran deportista. Sus compañeros del Cadete ‘B’ estaban en ‘shock’ . Sus entrenadores, absolutamente destrozados. Pero, lógicamente, era su familia la que no tenía consuelo. Nacho había sido jugador desde pequeño: su padre, Fernando, es directivo de la UD Alzira y siempre ha estado muy involucrado con las actividades de la entidad.

Padre e hijo, de hecho, participaron el pasado verano en una iniciativa novedosa de la FFCV, con un torneo de fútbol playa Sub-15 en el que Fernando fue el entrenador de la UD Alzira de futplaya y Nacho ejerció como jugador del equipo. El tandem funcionó a la perfección: el conjunto alcireño se alzó con el trofeo de campeón en el torneo de exhibición disputado, entre otros lugares, en la Playa de la Patacona.

La oleada de muestras de condolencia desde todos los puntos de España fue abrumadora. Muchos grandes clubes, entre ellos el Valencia CF, Levante o Villarreal, enviaron sus mensajes y acompañan a la familia en este duro momento. El fútbol regional valenciano al completo se volcó con la UD Alzira, que suspendió todos los partidos restantes del fin de semana en todas sus categorías. En solidaridad con ellos, el FB Ciutat de Alzira hizo lo propio.

También fueron horas duras para el Sport Base Ontinyent, cuyos futbolistas del Cadete ‘A’ también sufrieron el ‘shock’ de presenciar en vivo lo sucedido. Algunos de los presentes revivieron un trago muy amargo sucedido años atrás, cuando en abril de 2014 el jugador juvenil de 17 años, Óscar Martínez, también perdió la vida en pleno campo debido a una parada cardíaca.