ALICANTE (EFE). El central y capitán del Hércules, Samuel Llorca, aseguró este martes que los aficionados del club alicantino quieren canteranos en su equipo, pero matizó que una vez debutan son los primeros en recibir críticas.

"Es gracioso, la gente dice que hay que sacar canteranos, pero cuando salen los estamos matando enseguida", dijo el jugador, quien añadió que "al final viene uno de fuera que hace menos y no pasa nada, le aplaudimos".

"Así somos los alicantinos para lo bueno y lo malo", agregó el defensa, quien dijo estar acostumbrado a las críticas y a la exigencia de los aficionados del Hércules.

"No sé si por ser alicantino o herculano. Yo siempre intento hacerlo lo mejor posible y luego el entrenador decide", añadió.

Samuel dijo que el equipo afronta la llegada de Jesús Muñoz, nuevo entrenador, con ilusión tras unos días "fastidiados" por la salida del anterior técnico, si bien matizó que ante la dinámica del equipo cambiar algo era necesario.

"Si haces mucho tiempo una cosa y no te da, hay que cambiar", dijo el alicantino en alusión al relevo de Lluís Planagumà, si bien añadió que la única diferencia con el pasado curso, en el que el Hércules rozó el ascenso, "son los resultados".

"El fútbol tiene estas cosas. Somos los mismos futbolistas, pero las pequeñas cosas que antes iban a favor ahora están en contra", explicó Samuel, quien achacó toda la responsabilidad de la mala situación del Hércules "a los futbolistas".

El capitán justificó el enfado de la afición herculana y admitió que pensar ahora en ser campeón de grupo se hace "difícil", por lo que abogó por marcar "objetivos a corto plazo".

"Ahora tenemos que pelear por la permanencia porque estamos abajo, pero creo que el equipo acabará dándole la vuelta a la situación y estando arriba", señaló Samuel, quien desveló las nuevas líneas maestras que pretende inculcar el entrenador.

"Quiere que juguemos en campo contrario, que presionemos alto, claridad con el balón y que creemos ocasiones de gol", explicó el defensa, quien pidió "tiempo" para poder llevar a la práctica el nuevo modelo.

En cuanto a la posibilidad de comenzar la nueva etapa en el banquillo, Samuel dijo que lo asumiría con normalidad. "Soy un trabajador más. Intento que en el equipo haya armonía, trabajo y sea exigente y estoy para lo que quiere el míster", concluyó.