VALÈNCIA. El inicio de la temporada del Valencia, en la que ya ha disputado diez encuentros entre Liga y Liga de Campeones, está marcado por los penaltis, tanto a favor como en contra, tanto marcados como fallados, que han condicionado la dinámica de resultados del equipo en la mayoría de los encuentros jugados.

Más allá de cuestiones extrafutbolísticas como la polémica por el cambio de entrenador, con la llegada de Albert Celades para sustituir a Marcelino García Toral, o las críticas de la afición a la gestión del propietario del club, Peter Lim, y el presidente, Anil Murthy, en el plano competitivo y sobre el césped, el inicio de campaña tiene como protagonista a las penas máximas.

El Valencia ha lanzado hasta el momento seis penaltis de los que ha marcado cuatro y ha recibido tres de los que solo uno acabó en gol y la mayoría de ellos han sido decisivos para el resultado de los encuentros en los que se señalaron.

Uno de los partidos más significativos al respecto fue el primero del campeonato de Liga en el que muy poco antes del final y con un 1-0 a favor en el marcador, Kevin Gameiro falló su disparo en un partido en el que Dani Parejo, habitual lanzador del Valencia, no estaba por sanción.

Del 2-0 se pasó al 1-1 también con un penalti lanzado por Oyarzábal tras una mano de Coquelin cuando el reloj ya marcaba el minuto cien de juego. Fue un choque en el que el árbitro prolongó el encuentro mucho más tiempo de lo que lo hizo el colegiado del último Valencia-Alavés, en el que una interrupción por un problema eléctrico mantuvo el juego parado casi cinco minutos.

En el segundo partido de Liga, Jesper Cillessen paró un penalti en Vigo en el último minuto de juego a disparo de Denis Suárez. Fue una acción intrascendente pues llegó el tiempo de prolongación y el Celta ya ganaba por 1-0.

Dos penaltis marcados por Parejo dieron la victoria ante el Mallorca por 2-0 en el último encuentro de Marcelino al frente del Valencia, mientras que la etapa de Celades comenzó con una derrota por 5-2 en el Camp Nou en un choque sin penas máximas.

Tan trascendente o más que el de Oyarzabal en la primera jornada fue el fallado por el Chelsea en el debut europeo del Valencia, aunque en esta ocasión la circunstancia favoreció al Valencia, ya que el error de Barkley a escasos minutos del final permitió a los valencianistas mantener el 0-1 y sumar la primera victoria en la Liga de Campeones.

A continuación, el Valencia abrió de penalti, por medio de Parejo, el marcador del Valencia-Leganés que acabó con empate a uno y ante el Getafe (3-3 en Mestalla) y Athletic Club (0-1 en San Mamés) no hubo penas máximas, aunque frente al equipo madrileño el Valencia reclamó uno por mano de Cucurella casi al final que el VAR no consideró.

En los dos encuentros más recientes las penas máximas han vuelto a ser protagonistas ante el Ajax (0-3) y contra el Alavés (2-1), partidos jugados esta semana en Mestalla y que acabaron con derrota y victoria, respectivamente, para los hombres de Celades.

Frente al equipo holandés Parejo falló un lanzamiento al enviar el balón muy alto cuando el marcador era de 0-1 y frente al Alavés hizo el provisional 2-0 al batir la meta del equipo vasco con un lanzamiento a lo Panenka.

Por todo ello, de los trece goles que ha marcado el equipo en sus primeros diez encuentros de competición oficial, cuatro han sido de penalti, lo que supone el treinta por ciento del total.