VALÈNCIA (EFE/Loli Benlloch). Usan tecnicismos como "poner pecho palomo" o el "ombligo chincheta" y acaban sus directos diarios con abrazos virtuales tras los estiramientos: son 'Juntas Es Mejor', la opción para quienes nunca hacen deporte pero ahora que están confinados en casa quieren "activarse" sin sufrir y con una sonrisa.
Paula Lorente y Patricia López, dos licenciadas en Educación Física que impulsaron hace casi cinco años el movimiento 'Juntas es mejor' para fomentar la actividad física y el deporte entre las mujeres -que ha sido premiado por el Ayuntamiento y la Diputación de Valencia- ofrecen desde el 14 de marzo clases de unos 45 minutos a quien quiera entrenar "sin agobios".
"Queríamos aportar algo a esta situación excepciona, y recurrimos a lo que sabemos hacer: la actividad física", explica a EFE Paula Lorente, quien destaca que el público al que se dirigen son "las mujeres reales, que tienen cargas familiares, poco tiempo y a las que les cuesta hacer deporte" y ahora saben que se tienen que mover.
Cada una desde su casa, a través de Instagram y YouTube imparten clases conjuntas en las que no hacen falta más complementos que una botella de agua para hidratarse, un brick de leche o un bote de conserva para levantar peso o una silla para apoyarse, y en las que hay que seguir instrucciones como "poner culo de pato" o los hombros "de bailarina".
"Nuestro público no quiere técnicas o agobios de mucha repetición y muy intenso, sino algo donde, aparte de estar más fuertes, lo pasemos bien", señala Paula, a lo que Patricia añade entre risas que van a crear un "diccionario" con las expresiones "gráficas" a las que recurren, pues aquí no se habla de 'core' ni de 'burpees'.
Más de 600 personas se conectan a diario, en directo o diferido desde toda España e incluso desde otros países, como Argentina, Chile, Perú o Alemania, a unas clases cuyo contenido cambia cada día para que no se hagan monótonas, y en las que lo mismo se simula que se lanzan bolos o se hacen saques de tenis, que se hacen posturas de yoga o sentadillas.
"Les engañamos un poco", confiesan ambas, pues mientras se calienta a ritmo de rock, de bachata o el 'Sarandonga', "cuelan" ejercicios de tonificación o sentadillas. "Te echas unas risas y te lo estás pasando tan bien que ni te das cuenta, aunque al día siguiente salen las agujetas", admiten.