VALÈNCIA. Andoni Iraola, entrenador del Rayo Vallecano, declaró este domingo que el Valencia es un "rival potente, que se encuentra en un gran estado de forma", aunque advirtió que su equipo "necesita los puntos y juega en casa", dos factores que deben influir para sus opciones de victoria.

El Rayo Vallecano se encuentra inmerso en plena crisis de resultados y acumula once partidos ligueros sin ganar, una mala racha que no encadenaba desde 2003, cuando estuvo trece jornadas sin celebrar una victoria y descendió como colista a Segunda.

Esta jornada recibe en Vallecas al Valencia, finalista de la Copa del Rey y en plena carrera por los puestos europeos.

"Espero un partido difícil ante un rival en un gran estado de forma, que viene de unos grandes resultados en Liga y que tiene, además, el premio de tener una final de Copa a la vuelta de la esquina. Es un rival potente, pero necesitamos los puntos y jugamos en casa", declaró Iraola, en conferencia de prensa, tras el entrenamiento vespertino.

"Venimos de un partido en el que el equipo estuvo muy bien y queremos continuar con esa línea de juego que nos ayude a conseguir la victoria, que nos pondría en una posición muy buena de cara a final de Liga".

La victoria del Mallorca frente al Atlético de Madrid ha apretado la clasificación por la zona baja y el Rayo ve el descenso a cinco puntos.

"Presión va a haber, pero nosotros tenemos que mirar lo nuestro. Hacer los puntos que tengamos que hacer y mejorar las cosas que hacen que no sumemos de tres últimamente. Creo que estamos haciendo cosas suficientes para hacerlo, lo estamos viendo en partidos anteriores y esta semana con expulsiones y penaltis que van más allá de si juegas mejor o peor. Es cuestión de competir mejor o peor. Hay que sacar rédito a los merecimientos mejor de lo que lo estamos haciendo últimamente", señaló.

El técnico vasco, expulsado frente al Granada, no podrá sentarse en el banquillo para dirigir a su equipo contra el Valencia.

"Lo veré con más nervios de como lo viviría en el banquillo. Me parece un castigo desmesurado por lo que me expulsan el otro día, lo dije al final del partido y ahora, en frío, el pensamiento es el mismo. Me hubiera gustado estar ahí para corregir cosas y vivirlo de forma más directa. Confiamos en el resto del cuerpo técnico, que seguro que lo van a transmitir mejor que yo y hoy en día, con los medios que hay, no creo que tenga trascendencia en el partido", concluyó.