ALICANTE. Locura. Esa es la palabra correcta para definir lo ocurrido en los dos primeros días de venta de entradas para el partido que enfrentará al Hércules con la Ponferradina el próximo domingo, correspondiente a la ida de la eliminatoria final por el ascenso a Segunda División A.
Si el martes eran más de 6.000 las entradas dispensadas, este miércoles la cifra era de 5.500 por lo que el número de entradas vendidas alcanza la cifra de 11.500, a cuatro días para la disputa del partido.
Entre la altísima demanda y que la única posibilidad de adquirir entradas es en las taquillas del fondo sur del José Rico Pérez, las colas alrededor (literalmente) del estadio están siendo de aúpa, incluso antes de que se inicie la venta y superada holgadamente la hora de finalización de la misma (el club no deja sin atender a ninguno de los sufridos aficionados que espera en la cola pese a haberse alcanzado la hora de cierre de la taquilla).