ELCHE. "Muy contento". Así decía sentirse Fran Escribá tras el empate de su equipo con el Athletic de Bilbao en el partido inaugural del curso 2021/22.

El preparador valenciano del Elche le ponía a su equipo "un notable", nota que entendía que no era sobresaliente porque les había faltado "acertar en alguna de las ocasiones de que habían dispuesto". Aún así, para Escribá los suyos habían sido "superiores" y "merecido ganar" al Athletic en un encuentro que decidía encarar con un sistema de tres centrales y dos carrileros, una apuesta táctica que consideraba que les había salido "bien, tanto en ataque como en defensa" y con la que desvelaba que trataba de contrarrestar la velocidad de los puntas rojiblancos: "El tercer central ha salvado varias acciones con Williams y Villalibre; pensábamos que íbamos a estar más protegidos atrás, pero también a contar con mejor salida de balón", decía Escribá, que aclaraba que tanto Enzo Roco como Raúl 'Guti', que se habían visto obligados a retirarse antes de tiempo por problemas físicos, no sufrían lesiones como tales (el central acusó muscularmente la falta de entrenamiento y el mediocentro sufrió un golpe en el muslo).

El preparador franjiverde, que también ponía el acento en la aportación ("Salga el que salga, juegue el que juegue, todos suman; somos un buen grupo") que había llegado desde el banquillo "pese a que el sistema limitaba los cambios", se mostraba una vez más convencido de la llegada de fichajes, aunque insistía en no pronosticar cuándo: "Soy optimista; estoy convencido de que va a venir gente, pero ya sabéis que no me atrevo a dar plazos. Se han intentado cosas (ponía el ejemplo del mediocentro Manu Morlanes, que ha terminado siendo cedido por el Villarreal al Espanyol) y se están viendo otras opciones. Es imposible que afrontemos una Liga como la nuestra con 19 futbolistas de los que, además, 10 son de atrás", remarcaba.

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