ELCHE (EFE). El Atticgo Elche buscará este sábado recuperar su mejor versión de la temporada para superar al Porriño en la ida de la semifinal de la Liga Guerreras Iberdrola (16:30 horas) y acercarse así a su segunda final de la temporada, aunque con la tranquilidad de que el cruce se decidirá en su pista en el choque de vuelta.

El equipo ilicitano, ya clasificado para la final de la EHF Copa Europea, superó en cuartos de final con cierta suficiencia al Beti Onak, si bien su juego no alcanzó el nivel de otras fases de la temporada, sobre todo en ataque, tal y como reconoció estos días su entrenador, Joaquín Rocamora.

“Nos está faltando finura y estamos repetitivos en ataque”, admitió el entrenador, quien confía en que no se vuelvan a repetir las lagunas ofensivas de los dos últimos partidos, en los que el Atticgo Elche, pese a ganar el partido estuvo 16 y 9 minutos sin anotar un gol en dos fases del choque.

En cuanto al Porriño, el técnico recordó que ambos equipos “se conocen mucho” y destacó la gran relación que mantiene con su entrenador, Ismael Martínez, con el que comparte filosofía de juego y metodología.

Rocamora espera recuperar a la brasileña Kelly Rosas y mantiene la duda de la internacional española Danila So Delgado, clave en el juego de ataque y que sufrió un golpe en el brazo en el partido del pasado martes.

El técnico lamentó el poco tiempo que ha tenido su equipo para preparar el partido, algo de lo que responsabilizó al calendario de la presente temporada.

“Intentaremos comenzar bien el partido. Van a llenar el pabellón y es posible que noten la presión. A ver si hacemos un buen partido y recuperamos sensaciones”, señaló el entrenador, quien se mostró preocupado por la dependencia ofensiva que tiene su equipo de determinadas jugadoras.

“No me gusta depender siempre de alguien. Estamos siendo previsibles y le damos demasiada información al rival de cómo atacar. Intentaré darle una vuelta para ser un equipo más coral”, concluyó.