LA VILA JOIOSA. El líder de Gent per la Vila, Pedro Alemany, repetirá en las elecciones municipales de 2023 como cabeza de lista de su partido para ser el candidato a la alcaldía del Ayuntamiento de la Vila Joiosa. Así lo ha anunciado este lunes en una comparecencia ante los medios de comunicación. De esta manera, zanjaba los rumores que le situaban de nuevo en el PP. Alemany lleva tres legislaturas como concejal del Consistorio, las dos últimas en el gobierno con diferentes pactos, pero siempre dando la alcaldía al PSOE liderada por Andreu Verdú, del que dijo ser, además de compañero de corporación, amigo.
En estos últimos cuatro años le depositó la confianza para ser el edil de Urbanismo, Aguas y Vías Públicas. Su resultado en las elecciones le dio un asiento en el pleno, y a su vez, la llave para dar el gobierno al bando de izquierdas, como así ocurrió, siendo el tripartito al que se sumó Compromís. El PSOE (ocho concejales), Compromís (dos) y GPV (uno) llegaban a los 11 de mayoría. Mientras que este último más PP (seis regidores) y Cs (cuatro) también. Dejaba fuera por tanto a su anterior partido, con el que llegó a ser concejal en el Ayuntamiento y disputó ser cabeza de lista a Jaime Lloret, portavoz del PP hasta ahora.
Según explicó Alemany en su comparecencia, los populares le habían tanteado para buscar una integración para los próximos comicios. Hay que tener en cuenta que Gent per la Vila se constituyó para las elecciones de 2011 como independiente, cuando Lloret accedió a la alcaldía con mayoría, y GPV consiguió dos regidores en la oposición.
Alemany indicó que la asamblea extraordinaria celebrada por al agrupación municipal acordó que el partido se presentara en solitario, bajo sus propias siglas y que su número uno volviera a ser él. A su vez, explicó que a principios de año dirigentes del PP a nivel provincial se pusieron en contacto con él para sondear la posibilidad de concurrir a las próximas elecciones integrados en su candidatura en pro de una unión entre todas las sensibilidades del centro-derecha para tener garantías de llegar al gobierno. Una declaración de intenciones que no le disgustaba, pero que se quedó ahí, sin que el PP retomara las conversaciones desde aquel momento hasta ahora.
Alemany afirmó que en ningún momento ha escondido estos contactos con el alcalde, Andreu Verdú, y reiteró que fueron los del PP quienes le buscaron, aunque se quedó en una toma de contacto que no acabó en ningún acuerdo.
Con todo, aprovechó para recordar que gracias a haber entrado en un gobierno de izquierdas, han sacado adelante proyectos que desde la oposición no habrían podido, como es el caso del parking disuasorio junto a la fábrica de Valor, paralizado por temas judiciales. Pero no todo es color de rosa, también ha tenido su falta de entendimiento ideológico como la eliminación de la denominación bilingüe del municipio, "los números eran los que eran".
A continuación, en el balance de estos cuatro años, mencionó que en el terreno de la iniciativa privada se ha superado las expectativas iniciales en cuanto a concesión de licencias de obra mayor y obra menor, declaraciones responsables, acometidas de agua y alcantarillado, licencias de ocupación, etc. Además, han tramitado unos 2.500 informes y consultas urbanísticas. Entre otras cuestiones, destacó la gestión de los terrenos para la ampliación del Hospital Marina Baixa o la recepción de "numerosas" obras de urbanización como el sector PP-33.
Finalmente, Alemany aseguró que se había cumplido o impulsado el 90% de los proyectos incluidos en el Pacto de la Barbera con respecto a sus concejalías. Y avanzó que para las elecciones se presentan con nuevos compromisos, ideas y proyectos, a los que añadió que la ciudadanía podría integrar aportaciones de interés.
