El Hércules camina dando pasos cortos y torpes

ALICANTE. Con pasos cortos y torpes, de manera incompatible con una planificación dirigida a competir por el ascenso en el curso 2021/22. Así camina el Hércules estos días por decisión de Enrique Ortiz.

El club blanquiazul procedió este martes a enviar la remesa de nóminas correspondiente al mes de mayo, de tal forma que los jugadores cobrarán este jueves como tarde, evitándose que denuncien ante la Asociación de Futbolistas Españoles (algo que hubiese tenido muchas implicaciones: económicas y federativas, además del coste reputacional). Al margen de lo anterior... poco más. 

El empresario por fin habló (fue de manera telefónica) con el director deportivo, Carmelo del Pozo, pero no para que este empiece a formalizar contratos con los futbolistas cuyo fichaje tiene apalabrado. Tampoco para que se reúna con los jugadores que tienen contrato en vigor para el próximo curso (pese a que no se cuenta con todos y con los que sí entran en los planes se intentará renegociar sus contratos) y mucho menos para asegurar la continuidad de sus colaboradores (el segoviano es de los pocos del 'staff' técnico que no acaba contrato este 30 de junio; ese día vence la vinculación de Alejandro Varela y Ángel Becerra, por ejemplo). Ortiz se mantiene firme en su decisión de reducir su aportación económica al club. 

Así están las cosas en el Hércules, mientras el resto de equipos siguen fichando, empezando por el vecino y rival directo, el Intercity, que el lunes se hizo con los servicios del mediocentro Miguel Marí, futbolista que estaba en la agenda del club blanquiazul.