ELCHE. El nuevo presidente del PP de Elche, Pablo Ruz, no va a forzar la máquina para el relevo de la portavocía en el grupo municipal. Si no hay acuerdo entre los nuevo regidores, como sucede hasta ahora, Ruz mantendrá su hoja de ruta sin generar tensiones en el grupo: su objetivo será ir manteniendo una agenda activa con colectivos y vecinos de la ciudad, con parecencias públicas cuando sea necesario, pero sin el afán de romper la estabilidad en el grupo municipal.
Como se recordará, Ruz y otros cuatro ediles afines a la dirección local, solicitaron el relevo de la actual portavoz, Mercedes Alonso, pero al no haber una unanimidad en la decisión, el equipo de gobierno encargó un informe al secretario. El pasado 23 de septiembre, el informe del secretario reiteró que era necesario la unanimidad de los 9 concejales para proceder al relevo, por lo que ratificó a Mercedes Alonso como portavoz. No obstante, el secretario dio un plazo de nueve días para que se produjera era consenso entre los 9 regidores, si de verdad quería relevar a la portavoz.
Pero visto el panorama, y que las posiciones siguen inalterables -las llamadas de atención a Mercedes Alonso desde de la dirección para que ceda no han surtido a efecto-, Pablo Ruz no es partidario de forzar la máquina: si no hay consenso, el actual presidente mantendrá su hoja de ruta de redoblar los esfuerzos por intensificar la agenda y tener más presencia pública. El grupo municipal seguirá igual, si no hay acuerdo de última hora: Mercedes Alonso de portavoz, y Vicente Granero, de adjunto. Ruz seguirá de concejal de raso, pese a que muchos referentes locales y ex portavoces del PP habían sugerido la posibilidad de hacer un comunicado público reclamando a Alonso que diera un paso atrás. De momento, eso no se ha producido.