ELCHE. El vicesecretario de Comunicación del Partido Popular, Pablo Casado, uno de los siete candidatos a liderar la organización tras el abandono de Mariano Rajoy, que vuelve a su plaza de registrador de la propiedad en Santa Pola —para lo que tuvo un guiño—, empieza su gira por la Comunitat Valenciana. A su paso por Elche, su segunda ciudad natal tras Palencia, ya que su mujer es ilicitana y su hija también, el joven aspirante aglutinó a medio centenar de afiliados y simpatizantes para explicar su proyecto, al que denominó como “el único capaz de lograr la unidad”, y que tuve más jóvenes de los habituales, aunque moderadamente.
A la corta charla que tuvo lugar en la cafetería del Centro de Congresos asistieron los habituales hombres y mujeres de confianza de Pablo Ruz que también estuvieron en la primera convención local de la pasada semana. Además del propio presidente del partido, el hombre fuerte aquí de Casado, estuvieron los diputados Juan de Dios Navarro y Pepe Salas, las ediles Manoli Mora, Loli Serna, y Sergio Rodríguez, el exconcejal Antonio Luis Martínez Pujalte —uno de los artífices del proyecto de Ruz—, así como figuras de la Ejecutiva como el secretario general José Navarro y la vicesecretaria de Formación y Acción Sindical de la Ejecutiva, Elena Bonet, o la exaspirante a liderar el partido Enriqueta Seller. Pero ante todo, fue un pequeño acto con militantes de base y simpatizantes.
Asimismo, ante una expectación moderada viendo el número de personas que acudieron al encuentro con el candidato, sí fue notoria la edad media de los asistentes, más baja de lo habitual, como se vio en la propia convención, por ejemplo. Hubo una nutrida presencia de afiliados de mediana edad y gente joven, con miembros de Nuevas Generaciones (NNGG), tanto de los que apoyaron a Ruz, como de los que estaban con el sector de Mercedes Alonso. También hubo alonsistas fuera de NNGG que acudieron al acto.
Su intervención ante los asistentes se limitó a tres ejes: a la renovación del partido, que pasa por horas bajas —como muestran las encuestas— tras la salida del Gobierno y los escándalos de corrupción, sumados a la suma de votos fugados a Ciudadanos; la de abrir el partido para volver a incorporar a gente que ha abandonado el proyecto y la de conseguir la unidad, de la que él mismo dice que es el único que puede conseguirla. Un discurso este último en el que incidió en ese aspecto regenerador, haciendo énfasis en que las otras formaciones nacionales ya tienen líderes de su generación. De ahí que hubiera más asistencia joven de lo normal en un acto del PP a nivel local.
Por otra parte, mostró el apoyo a Pablo Ruz en Elche y a Isabel Bonig, líder de los populares en la Comunitat y pidió participación masiva de la afiliación. También intentó ilusionar a los asistentes porque es lo que las bases piden para este nuevo proyecto, y abrirse hacia otros sectores de la sociedad civil, haciendo valer su generación, que rompería con liderazgos anteriores, para “recuperar el centro derecha de este país”. De Elche y el territorio destacó el turismo, el carácter emprendedor y su carácter cosmopolita, así como los dos patrimonios y su potencial industrial. Se comprometió a llevar a Madrid las principales reivindicaciones de la ciudad.
