ALICANTE. Muy satisfechos con la respuesta de los aficionados, pero no con la de los políticos. Así se mostraban los impulsores de la manifestación que este domingo recorrió las calles del centro de Alicante, reclamando la salida de Enrique Ortiz del Hércules.
"Como institución estamos en la UCI, pero ayer pudimos ver que la afición todavía respira". De esta manera tan descriptiva expresaba Sergio Fabra, portavoz de Unidad Herculana, su opinión sobre el desarrollo de la manifestación, que precisamente convocó el colectivo por el que habla. "No hay que celebrar hasta que consigamos el objetivo de que salga Ortiz del club, pero estamos muy satisfechos con la respuesta de los aficionados que fueron, lo dieron todo", señalaba a Alicante Plaza Fabra, que ponía el acento en los discursos pronunciados en la plaza del Ayuntamiento porque "se dijeron verdades como puños". Eso sí, aunque calificaba de "muy bonito todo", en Unidad Herculana" no escondían su decepción "con los políticos" por no haber cumplido con su palabra, toda vez que les prometieron a los aficionados, en la reunión del martes, que estarían junto a ellos en la manifestación: "Uno puede votar a un partido determinado en unas elecciones y que luego no cumpla su programa, pero esto me duele más porque es como que te mienten a la cara", precisa Fabra para, a continuación, explicar que durante la semana ya se fueron haciendo una idea de lo que podía pasar porque "al fin y al cabo son políticos" y desvelar que tanto él como el presidente de Unidad Herculana, Aitor García, le remitieron el pasado viernes un correo electrónico a cada uno de los portavoces municipales que se reunieron con nosotros expresándoles su agradecimiento y recordándoles "lo importante que era contar con ellos en la manifestación" y se encontraron con que "ni uno solo contestó". "El martes nos pidieron que hiciéramos presión pacífica", prosigue Fabra, "les dijimos que estábamos de acuerdo, pero que teniendo en cuenta lo anestesiada que estaba la afición era tan necesario su apoyo expreso como que se les viera en la manifestación". Para el portavoz de Unidad Herculana, de haber cumplido su palabra los políticos "más aficionados se hubiese animado a sumarse a nuevas movilizaciones", pero deja claro que eso no afecta a su hoja de ruta: "Nuestra estrategia es a medio y largo plazo, no sé cuánto vamos a tardar, pero tengo clarísimo que lo vamos a conseguir", concluye.
Además de Unidad Herculana, otras peñas y la Asociación Herculanos se sumaron a la manifestación. Quique Tébar, presidente de este colectivo, también destacaba "que el herculanismo sigue vivo, porque la asistencia fue muy buena", al tiempo que volvía a poner en duda la cifra oficial de manifestantes. Aunque era menos ácido en su crítica, Tébar también dejaba entrever su decepción con los políticos: "Valoramos que algún representante político fuera, aunque lo hiciera a título individual, pero es verdad que han estado a medio gas: nos estuvieron ayudando durante la semana, dándonos voz en el pleno, acelerando los procesos para poder manifestarnos e incluso y facilitando infraestructura técnica para poder tener megafonía en la plaza, pero si no querían marchar con nosotros, al menos podían habernos recibido ayer", decía el presidente de la Asociación Herculanos, que reconocía que lo anterior "va a dificultar las cosas", pero también puntualizaba que no se iba a venir abajo: "Como decía Felipe Miñambres, al final la piel se te vuelve dura, como la de los cocodrilos", sentenciaba.
