Los vecinos rechazan ensayos con las terrazas: las pantallas antirruido obstaculizan a las ambulancias

ALICANTE. Rechazo frontal a la propuesta planteada por hosteleros y empresarios del ocio para reducir los niveles de ruido asociados a las terrazas. Los vecinos del Centro Tradicional no están dispuestos a conceder el beneficio de la duda a un hipotético ensayo de las pantallas antirruido que los titulares de veladores pretenden poner en marcha con la colaboración del Ayuntamiento de Alicante e insisten en solicitar que se delimite el cuadrante de calles del Centro y del Casco Antiguo como Zona Acústicamente Saturada (ZAS). Es más, si no cuentan con un compromiso oficial en ese sentido a lo largo de la próxima semana, acudirán al juzgado para que sea un juez el que fuerce a adoptar esa resolución. 

Así que la posición de los residentes sobre esas pantallas es más que tajante. Ya no sólo por no tener garantías de su eficacia, sino también porque "la solución no puede ser colocar más mobiliario en la calle; de lo que se trata es de liberar espacios para que puedan acceder los vehículos de los servicios de emergencia, en el caso de que sea necesaria su intervención". Ese es, precisamente, uno de los puntos recogidos en el paquete de alegaciones que presentaron ante la última actualización de la ordenanza de Ocupación de la Vía Pública. Y, también, el factor que habría llevado a esa misma concejalía a promover un plan de ordenación de veladores para la calle Castaños y adyacentes, bajo la coordinación de Miguel Ángel Pavón, antes de que él y sus cinco compañeros de Guanyar renunciasen a las competencias que tenían delegadas y abandonasen el equipo de Gobierno por el rechazo del alcalde, Gabriel Echávarri (PSOE), a dimitir. 

Como informó Alicante Plaza, en esa propuesta de ordenación -que no llegó a entrar en vigor ni a recogerse en ningún decreto- aspira a liberar el espacio central de las vías peatonales, para permitir el acceso de los vehículos de emergencias. En función de esa regulación, las terrazas de los establecimientos quedarían reagrupadas junto a sus fachadas, lo que conllevaba una reducción de un 30% en el número de mesas y sillas autorizadas. Como también informó este diario, los hosteleros trasladaron su rechazo a ese plan de ordenación y reclamaron el estudio de alternativas previas como las mamparas retráctiles que ya están probándose en ciudades como Málaga.

Los empresarios alegaron que, según los impulsores de esas mamparas retráctiles, puede conseguirse una reducción de los niveles de ruido de hasta 20 decibelios y defendieron que no supondría ningún impedimiento para el acceso de los vehículos de los servicios de emergencia, ya que se trata de estructuras no fijas, retirables. Hasta el momento, la Concejalía de Ocupación de Vía Pública, ahora en manos de la socialista Eva Montesinos, sólo ha mostrado su predisposición a estudiar el ensayo de esos elementos, aunque no tomará una decisión hasta conocer el sistema en profundidad. Lo que sí ha acordado ya es la retirada del decreto de ordenación de veladores de la plaza de Gabriel Miró, promovido por Pavón, tras aceptar los recursos presentados por Alroa y por la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Alicante (APEHA), en los que, entre otros argumentos, alegaban indefensión por parte de algunos hosteleros a los que no se les había dado la oportunidad de presentar alegaciones.