Uno de los autobuses con las lunas rotas por un lanzamiento de piedra.ALICANTE. Las asociaciones de vecinos del segundo sector de Juan XXIII y de Colonia Requena han registrado una solicitud, dirigida al Ayuntamiento de Alicante, en la que requieren formalmente la restitución de los recorridos de las líneas L6 y L11 del servicio público de transporte en autobús en condiciones de seguridad, después de que se haya registrado varios incidentes por el lanzamiento de piedras sobre los vehículos, y se haya suprimido el paso por la calle Barítono Paco Latorre.
En ese escrito, ambos colectivos apuntan que "sin previo aviso, el servicio público de autobús ha sido suprimido en la calle Barítono Paco Latorre, afectando muy gravemente a los derechos de los usuarios de toda una amplia zona de Alicante". "La Asociación de vecinos de Juan XXIII, 2º sector, la Asociación de Vecinos Barrio Colonia Requena, demandamos al alcalde de Alicante, D. Luis Barcala Sierra que, como jefe de la Policía Local, proceda con toda urgencia a mantener la seguridad en el recorrido del autobús L6 y L11, restableciendo este esencial servicio público", añade el escrito.
En este sentido, las asociaciones sostienen que "según la información facilitada por la empresa concesionaria, Masatusa, viene soportando, desde hace unos 40 días, 23 ataques a sus autobuses mediante piedras de grandes dimensiones y peso, que al impactar contra las ventanas acristaladas de los autobuses penetran violentamente en el interior, poniendo en grave peligro la integridad física de los usuarios y de los viandantes, ya que, al ser muy alta la posibilidad de la pérdida del control del autobús, podrían producirse accidentes de diversa gravedad".
"En nuestras asociaciones desconocemos qué tipo de medidas haya podido adoptar, durante todo este tiempo, el Ayuntamiento de Alicante, titular de este servicio público, ha tenido suficiente tiempo para tratar de identificar y sancionar a los autores de estos comportamientos incívicos, pero lo cierto y verdad es que la absurda consecuencia ha sido la interrupción indefinida de este esencial servicio público con un grave perjuicio para un considerable número de usuarios. Conviene resaltar que estos lamentables incidentes se producen insistentemente, durante muchos años, justo al lado de un retén de la Policía Local", abunda la solicitud.
Los vecinos apuntan que "el comité de empresa de Masatusa, nos manifiesta su gran preocupación porque estas agresiones, lejos de solucionarse, se están agravando, por lo que temen por la seguridad e integridad física de los conductores/as, de los usuarios del autobús y de los viandantes, siendo esta la razón por la que, ejerciendo su derecho a la prevención de riesgos graves e inminentes en aplicación de lo regulado en la Ley de Riesgos Laborales, se han visto obligados a exigir que se garantice plenamente la seguridad de empleados y usuarios".
"En nuestras asociaciones de vecinos somos conscientes de que la seguridad debe ser una cuestión prioritaria, comprendemos las exigencias del comité de empresa, al tiempo que no llegamos a entender que nuestro Ayuntamiento haya sido, hasta el momento, claramente incapaz de controlar un problema tan limitado en el espacio justo al lado de un dispositivo policial. Solamente desde la desidia y desde el permanente abandono a las preocupaciones y problemas de nuestros barrios es como se puede explicar que hayamos podido vernos desprovistos de este servicio público esencial. Por todo ello, manifestamos nuestro más absoluto rechazo al trato inadmisible que nos dispensa el Ayuntamiento y advertimos de nuestra voluntad de organizar movilizaciones con el fin de conseguir soluciones inmediatas y de dejar de ser tratados como ciudadanos de segunda", concluye el escrito.
Fuentes del equipo de gobierno han apuntado al respecto que ya se ha adoptado medidas como el incremento de la vigilancia a cargo de la Policía Local y que, además, se ha solicitado la intervención de la Policía Nacional a través de la Subdelegación del Gobierno al tratarse de una cuestión de orden público que recae bajo sus prerrogativas.
Por otra parte, el PSOE de Alicante ha mantenido una reunión con vecinos afectados por el cambio de recorrido de las líneas L6 y L11 del autobús público en la que les ha transmitido su total oposición a esta decisión. "Este tema es responsabilidad de Barcala. Es el alcalde el que debe incrementar la seguridad en la zona para combatir los actos vandálicos que se puedan producirse. A los usuarios de estas líneas no se les puede tratar como ciudadanos de segunda. ¿Es que van a tratar la Zona Norte como si fuera Afganistán?", ha indicado el secretario general del PSOE de Alicante, Miguel Millana.
El PSOE, a través de Lola Vílchez y Llanos Cano, ha transmitido a las asociaciones vecinales que "uno de los puntos claves que propuso el partido en los Presupuestos de 2022 fue la ampliación de la plantilla municipal, sobre todo Policía Local, pero este alcalde ha tumbado todas aquellas iniciativas dirigidas a mejorar las condiciones de vida de la ciudadanía". De hecho, según el PSOE, "uno de los principales problemas que tiene este alcalde es el sistemático abandono de los barrios, especialmente la Zona Norte". "No se puede tratar así a los vecinos de una zona de Alicante por culpa de que este Ayuntamiento sea incapaz de mejorar la seguridad. Los usuarios no pueden sufrir la negligencia de un Alcalde que mira para otro sitio cuando tiene un problema", afirman los responsables socialistas.
Los vecinos han trasladado su indignación durante la reunión con los representantes del PSOE local, según las mismas fuentes. "Nos han indicado que el el día 22 registraron en el Ayuntamiento una escrito exigiendo que se repongan las mismas paradas que tenía el servicio público municipal del autobús en Juan XXIII, 2º Sector, y que se respeten las frecuencias anteriores", indican los responsables socialistas.
Los vecinos también piden que se convoque la Junta de Distrito 2 en sesión extraordinaria, con el orden del día: Informe y memoria de las incidencias en el transporte público de las líneas L6 y L11, en su trayecto por Juan XXIII 2º Sector; Soluciones y protocolos de seguridad; y que se proceda a convocar la Mesa Técnica del Transporte para analizar la situación.
Por último, el PSOE recuerda que "el comité de empresa de Masatusa había manifestado a los vecinos su gran preocupación porque estas agresiones, lejos de solucionarse, se estaban agravando, por lo que temían por la seguridad e integridad física de los conductores/as, de los usuarios del autobús y de los viandantes, siendo esta la razón por la que, ejerciendo su derecho a la prevención de riesgos graves e inminentes en aplicación de lo regulado en la Ley de Riesgos Laborales, se han visto obligados a exigir que se garantice plenamente la seguridad de empleados y usuarios". "Aquí existe un único culpable, y es Barcala, incapaz de poner las medidas y medios necesarios para acabar con esta inseguridad que ha dejado a centenares de vecinos sin su habitual parada de autobús", han espetado Vílchez y Cano.
De igual modo, el portavoz municipal de Compromís, Natxo Bellido, ha añadido que "el Ayuntamiento debe mantener estas líneas 6 y 11, garantizando la seguridad de los trabajadores del bus urbano y poniendo freno a las actitudes incívicas. La solución nunca puede ser cortar el servicio en Juan XXIII. Así se lo exigimos".
