Los valencianos confían más en médicos y maestros que en sus líderes políticos, a los que exigen honestidad

ALICANTE. Ocho de cada diez valencianos anteponen las cualidades de bondad moral (79,5 %: honesto, generoso, resiliente) a las puramente racionales, como el hecho de ser trabajador que, con un 7,1 %, es el segundo en la clasificación.  Esta es una de las conclusiones que arroja la encuesta de la Fundación Liderar con Sentido Común realizada en octubre de 2022 a 1.000 encuestados de más de 16 años de la Comunitat Valenciana (que respondieron a un cuestionario basado en disciplina semiótica, estructurado de respuestas cerradas y abiertas, cuantitativas y cualitativas).

La encuesta ofrece los resultados de nueve cuestiones preguntadas a los ciudadanos de la Comunitat. Es el décimo cuarto sondeo que hace la fundación de una autonomía. Se trata, en todos los casos,  de un Observatorio social para la Comunitat Valenciana: Expectativas, miedos, alegrías y nuevas exigencias,  elaborado por su presidente, Antonio Sola, y por el consejero de FLSC, Pablo Knopoff. En lo que respecta al liderazgo, los valencianos marcan también las pautas de cómo debe ser su líder ideal y, para ello, respondieron que las principales cualidades que debe tener un líder para que se sientan inspirados por él son, con un 79,5 %, ser honesto, seguido de trabajador con un 7,1 %, de acuerdo con los datos ofrecidos por la fundación.

El presidente de la Fundación Liderar con Sentido Común ha explicado este miércoles en Alicante en que “si tenemos en cuenta todas las cualidades mencionadas, nos percatamos de que 8 de cada 10 valencianos (84 %) cree que un buen líder ha de contar con cualidades vinculadas a la bondad moral como honestidad, generosidad y resiliencia, entre otras, muy por encima de las capacidades racionales. La lectura que hacemos de este dato es también dura, porque significa que los valencianos han renunciado a exigir lo que creen que ya no van a lograr de sus líderes y se centran solo en características humanas que perciben como irrenunciables”, ha indicado Antonio Sola. "Se busca y pondera un líder con bondad moral con anclaje en un atributo en particular: la honestidad", ha añadido.

A la hora de responder quién es un líder para ellos, tres de cada diez valencianos (30 %) responde apuntando a sus padres, una figura que se enmarca dentro del primer metro cuadrado de las personas junto a médicos (13 %) y profesores (9 %), juntos suman un 52 %. Como incide la fundación, estos tres grupos se corresponden con liderazgos reconocidos como próximos a ese primer metro cuadrado de las personas -concepto acuñado por el consejero de la Fundación, Pablo Knopoff-, que supone dar respuesta a las necesidades intocables para cada uno (comida, empleo, educación de los hijos, salud, etc.). “Se muestra cierto impacto positivo de los que enseñan y/o cuidan desde lo más humano o cercano, y menos a lo institucional. Cuidan los cercanos, enseñan los cercanos: lideran los cercanos”, ha agregado Sola. Esta respuesta, vinculada a la demanda, anteriormente mencionada, de bondad moral, sitúan al valenciano fuertemente volcado hacia su íntimo, en donde está buscando las respuestas que no encuentra en otros ámbitos como el político, según las conclusiones de la fundación. El Rey Felipe VI obtiene un respaldo de 14%, según la encuesta, respuesta que no se da en otros estudios autonómicos, valoración muy por encima de alcaldes o presidente de la Comunitat.

Principal problema

De acuerdo con el sondeo, el principal problema para los valencianos es la incertidumbre, con el 31%, que es transversal a todo y posiciona en un panorama complicado, porque todo lo que conlleva incertidumbre es aún más difícil de manejar. Asimismo, exponen un argumento para entender por qué los políticos son mal evaluados y es porque claramente son un problema para la gente, quedando en segunda posición con un porcentaje del 27,4 % de los valencianos, según el seo de la fundación.

Otra de las conclusiones de la encuesta es la necesidad de nuevos liderazgos, para un 30% de los preguntados.  "Al parecer, con los actuales no basta y se argumenta la respuesta si hacemos referencia al reproche hacia la política como problema principal que vimos en la pregunta anterior", sostiene Sola. Desde la fundación, se señala que la aplastante ausencia de confianza en los actuales liderazgos es, sin duda, una de las respuestas más contundentes del estudio que conecta con las respuestas anteriores, evidenciando que la gente está imaginando líderes nuevos porque no pueden confiar en los actuales.

Ante la pregunta de cuánto sentido común cree  que tienen los líderes, seis de cada diez valencianos (62 %) reconoce que sus gobernantes carecen de sentido común o 7 tienen apenas un poco. Desde la fundación, se interpretan estos datos como un argumento más que ahonda en la lejanía entre los líderes y la gente, ya que pone de manifiesto la incapacidad para afrotar los temas que preocupan a los ciudadanos y, por tanto, invita a las personas a desconfiar de sus políticos".

Por último, también se les preguntó a los encuestados sobre la Comunitat Valenciana y los valencianos. De esta manera, se aprecia, según la encuesta, cómo, en general, domina una valoración positiva hacia lo que es el clima y el agrado que este genera a sus habitantes. Esto último se hace notar en la alta satisfacción que se demuestra con ese porcentaje de 37 %. Los valencianos además se valoran bien a sí mismos y se destacan como parte fundamental de lo que hace virtuosa la Comunitat. Ahora bien, en el otro lado, al ser preguntados por lo que más detestan de la Comunidad Valenciana, los valencianos fueron claros: los políticos lideran las respuesta, seguido de la actitudes de la gente; el valenciano como idioma y la poca empatía con el centralismo.