Ejército imperial de terracota creado por el primer emperador de China, Qin Shi Huang.ALICANTE. Los guerreros de Xian, la exposición más ambiciosa que esperaba albergar Alicante en mucho tiempo y que debía estar abierta al público en el Marq desde el próximo 17 de noviembre, hasta el 18 de abril de 2021, no podrá llegar este año y tampoco lo hará en el corto plazo. Según ha podido saber Alicante Plaza, las complicaciones surgidas por la crisis sanitaria, en cuanto a la limitación de aforo que tendría que darse a la hora de visitar la muestra, complican la viabilidad económica de esta actividad, que requeriría un público masivo para poder recuperar el importe de las tasas que el organismo provincial debe pagar a las entidades chinas que atesoran las esculturas.
La que sería la mayor muestra de los Guerreros de Xian nunca vista en España —con nueve figuras originales de esos aclamados guerreros, además de un caballo y otras muchas piezas nunca vistas fuera de China—, tendrá que esperar sine die, hasta que la situación sanitaria mejore y la exposición pueda ser un nuevo hito de público para el museo, que es lo que inicialmente se pretendía y a lo que no se desea renunciar.
Este ejército imperial de terracota creado por el primer emperador de China, Qin Shi Huang (260 a.C.-210 a.C.) fue enterrado en su mausoleo, descubierto en 1974 y posteriormente reconocido como Patrimonio de la Humanidad, en 1987. Su cesión es uno de los activos más reclamados por los museos más importantes del mundo y su muestra en Alicante pretendía ser un antes y un después para el Marq, que quería batir su récord de público hasta la fecha. El museo cerró el año 2019 con 190.206 visitantes, casi veinte mil más que el año anterior, lo que le situó entre los diez museos arqueológicos de España más visitados. Por otro lado, en 2009, solo la exposición La belleza del cuerpo llegó a tener 220.000 visitantes. Un dato que ahora ansiaba mejorar.
La cifra de piezas acordada con las autoridades chinas y sus museos duplicaba la de otras cesiones realizadas con anterioridad a España para exposiciones que han podido verse en Barcelona, Madrid y Valencia. Además, la figura del caballo de terracota era algo excepcional, ya que muy pocos de ellos se han desenterrado hasta ahora y las cesiones han sido muy puntuales. Por todo ello, la organización de esta exposición habría significado un salto cualitativo para el museo alicantino que se calificó por parte de la Diputación como “paso fundamental en su proceso de internacionalización”, que ahora tendrá que retrasarse y quedar en standby.
Con todo, el Marq había preparado ya sus instalaciones con una inversión de medio millón de euros para adecuar las tres salas temporales en las que se acogería a los Guerreros de Xian y las otras dos muestras anunciadas para esta temporada. Así, ni las características del museo alicantino ni las medidas de seguridad eran un obstáculo para llevar a cabo la exposición.
Durante el transcurso de esta muestra, que fue anunciada por la Diputación a mediados de 2018 y en la que se han ido sumando los retrasos, también debía además realizarse un intercambio cultural bilateral con el que el museo alicantino trasladaría hasta China algunos de sus fondos más valiosos. Incluso se había llegado a plantear que la orquesta ADDA Sinfónica actuara en el país asiático. Unas actividades que del mismo modo se han visto aplazadas hasta que, en el futuro, se retomen las reuniones de trabajo con representantes del Museo Nacional de Pekín, el Museo Provincial y el Museo de Historia de Sahaanxi, así como con el director del Centro de Promoción del Patrimonio Cultural de Shaanxi, en la región de Xian, que es donde se encuentran estas esculturas.
