MADRID. La fuerte subida de las tarifas del precio de la luz afecta a todas las capas de la sociedad. Particulares, comercios, hostelería, industria, ganadería, agricultura... ningún sector se salva. Tampoco el del mundo del fútbol. Los clubes, humildes o de primera clase, tienen que afrontar el pago de facturas más elevadas. Pero hay una fórmula que amortigua el daño: la iluminación LED.
El diodo emisor de luz, también conocido como LED (Light Emitting Diode) es un elemento capaz de recibir una corriente eléctrica moderada y emitir una radiación electromagnética transformada en luz. Esa definición engorrosa esconde un sinfín de ventajas que algunos clubes no han dejado escapar. Cuando la crisis de la luz aprieta, hay salida. Y algunos, lo demuestran con los datos en la mano.
La iluminación LED alivia las facturas de Osasuna
Uno de ellos es Osasuna, que cuenta con un espectacular estadio de última generación, El Sadar. Reformado recientemente, tiene una cubierta nueva, un revestimiento moderno, un incremento del número de espectadores y... luces LED. Ese cambio en el sistema de iluminación llega en el momento justo, cuando las facturas quitan el sueño a muchos clubes.
Según informó el club navarro a Efe, el gasto anual de la luz entre El Sadar y la Ciudad Deportiva de Tajonar asciende a unos 150.000 euros. Más o menos, unos 12.500 al mes. Esas son las cuentas anteriores al subidón que han experimentado los precios. Ahora, ya con luces LED, la cuenta de este año, a falta de el último trimestre, es de 40.000 euros.
La diferencia es clara. Por ahora, Osasuna, cuando la factura de la luz aprieta a todo el mundo, ha pagado 4.444 euros al mes, una reducción de más del 50 por ciento respecto al año pasado. Eso sí, aún quedan por contabilizar los tres meses más caros del año para un club de fútbol: octubre, noviembre y diciembre, en los que más se utilizan las lámparas para proteger el césped.
Esas lámparas pueden elevar la cuenta y desde Osasuna aclaran que es imposible saber cuál es el gasto exacto mensual en iluminación porque hay meses con más partidos que otros y las facturas pueden oscilar entre los 4.000 y los 20.000 euros. Sin embargo, con las luces LED, queda claro que, incluso con los precios al alza, se paga menos.
Esa puede ser una solución generalizada para que los clubes puedan cuadrar las cuentas de la temporada, que se verán afectadas por el incremento de la luz. Osasuna ya tiene la suerte de tener luces LED, pero otros equipos podrían hacer reajustes si no mejora la situación con las instalaciones tradicionales.
Preocupación en Vallecas
Es el caso del Rayo Vallecano, donde, según informó a Efe, están "preocupados" con la "deriva" que está tomando el precio de la luz. El club madrileño tiene que pagar las facturas del estadio y de la Ciudad Deportiva. El grueso de los gastos por iluminación provienen de los campos de entrenamiento, ya que el escenario donde juega el primer equipo se suele abrir cada quince días.
En la Ciudad Deportiva entrenan las escuelas, los filiales y el Rayo Vallecano Femenino. Todos lo hacen por la tarde y en los tres últimos tres meses del año, con el cambio de hora incluida, anochece antes y el gasto es mayor. "El precio de la luz podría afectar incluso al personal", aseguran fuentes del club madrileño.
Y, si eso ocurre en Primera División, la preocupación en categorías de menor entidad es máxima. Aunque la mayoría de los clubes del fútbol modesto juegan alquilados en instalaciones municipales de ayuntamientos que asumen también el precio de la luz, otros no tienen esa suerte.
Con las tarifas eléctricas disparadas, aparte del alquiler, muchos, por separado, tienen que pagar la luz. Y en otoño, cuando se multiplica el precio de los focos de los estadios y de los campos de entrenamiento, el roto en los presupuestos puede ser importante.
El fútbol humilde también sufre
En Madrid, la Escuela Deportiva Moratalaz, de la Tercera RFEF, representa a uno de esos clubes que pagan al ayuntamiento por el alquiler de sus dos instalaciones (campos de Urbis y de Lily Alvarez) pero que aparte tienen que abonar el mantenimiento.
En total, pagan por la concesión 95.000 euros al año. Y, luego, por otro lado, los gastos de agua, luz y gas. Ya tiemblan con las facturas que pueden llegar en los tres últimos meses del año. Sin embargo, uno de las dos instalaciones, los campos de Lily Álvarez, tienen desde hace unos meses iluminación LED.
"Hemos cambiado hace bastantes meses a LED y sí se nota considerablemente. En mayo de 2021 pagamos 150 euros, mientras que justo antes de la pandemia, en febrero de 2020, fueron 589 euros, aunque había menos luz natural. Pero con la nueva instalación se ahorra, eso seguro", afirmó a EFE Jesús Recio, secretario y tesorero del club.
Un mes normal, en la otra instalación, donde el Moratalaz disputa sus partidos de Liga, la cantidad, con luces tradicionales, asciende a más de 1.000 euros mensuales. En febrero de 2020, al límite de la pandemia, fue de 1.917 euros cuando no estaban los precios por las nubes. Ahora, hay terror con las facturas que pueden llegar de septiembre, octubre, noviembre y diciembre.
Como el Rayo Vallecano, hay terceros que podrían verse afectados. En el caso del Moratalaz, que se financia con las cuotas que pagan los cerca de 1.000 niños de la escuela, los precios, si el ayuntamiento renueva la concesión la próxima temporada al alza, subirán para los chavales.
"Ahora no podemos invertir en LED para el otro campo ¿Si lo hace el ayuntamiento? Genial. Pero no nos podemos gastar el dinero en eso porque no sabemos cuánto vamos a estar. Si supiéramos que tendremos una concesión de 50 años como otros equipos, mañana pongo los LED aunque cuesten un pastón porque sé que los voy a amortizar", apunta Recio.
Esa puede ser la clave para reducir gastos. El LED es una inversión para tiempos con tarizafos eléctricos. Osasuna ya lo sabe. Varias categorías por debajo, también son conscientes. Con una iluminación del siglo XXI, que requiere una inversión, la amortización es evidente. Los datos hablan por sí solos. Con LED, el tarifazo duele menos.