El actual secretario general del PSOE de Alicante, Miguel Millana, durante el proceso de votación en la asamblea celebrada en 2018. Foto: PEPE OLIVARESALICANTE. La negociación entablada entre los distintos sectores que conviven en el seno de la agrupación socialista de Alicante para afrontar la renovación de su ejecutiva parece avanzar con un primer principio de acuerdo hacia la presentación de una lista única: que ninguna familia tendrá capacidad de veto para excluir a los representantes que se pueda sugerir por parte de cualquier sensibilidad.
El pacto no es menor toda vez que se garantizaría el respeto de las propuestas que puedan plantearse para configurar la nueva dirección, con independencia de cuáles sean los nombres aportados. A la postre, el objetivo sería procurar una integración real no sujeta a hipotéticas cortapisas, según precisaron fuentes consultadas.
Sobre esa base, se seguiría avanzando en la búsqueda de un acuerdo que evite una posible confrontación entre dos o más aspirantes a la secretaría general, de modo que pudiese quedar despejada la reelección de Miguel Millana como secretario general durante un segundo mandato de otros cuatro años. Así, el escollo todavía irresuelto seguiría siendo la adscripción de porcentajes y representatividades entre el sector que sigue arrogándose la mayoría de la agrupación, que se agrupa en torno a Millana y al exsenador Ángel Franco, y los afines al nuevo secretario general provincial, Alejandro Soler, en el que quedarían aglutinados los antiguos sanchistas y varias corrientes que se habrían desligado de ese sector mayoritario al no compartir sus últimas estrategias al frente de la agrupación.
El acuerdo garantizaría el respecto de una integración real con la incorporación de los nombres que puedan plantearse desde todas las sensibilidades
En principio, el debate sigue girando en la adscripción de esa representatividad que podría oscilar entre un 70%-30%, o entre un 55%-45%, en función las posiciones que continúan manteniéndose sobre la mesa de la negociación. Hasta el momento, se habrían producido al menos dos encuentros para tratar de progresar en la resolución de un acuerdo definitivo, sin que el sector solerista haya renunciado aún a la posibilidad de lanzar su propio candidato. Es más, como ya ha informado este diario, se habría sondeado ya la predisposición de al menos una primera posible aspirante que pudiese llegar a medirse con Millana, cuya identidad no ha trascendido.
Entre tanto, la ejecutiva saliente prevé acelerar los trámites para acordar la convocatoria de la asamblea, puesto que, a priori, la elección de la nueva dirección debería producirse antes de que finalice el mes de abril, en función del calendario establecido por la dirección autonómica para los procesos locales. En esta línea, todo parece indicar que la ejecutiva podría mantener una reunión, este próximo lunes, día 18, con el objetivo de fijar la fecha de la votación. Se espera que la cita quede convocada previsiblemente, antes de la Romería de Santa Faz, el próximo 28 de abril o, como muy tarde, el sábado posterior, día 30, salvo que se pueda contar con un plazo posterior adicional.
