L'ALFÀS DEL PI. El Ayuntamiento de l'Alfàs del Pi ha aprobado su Plan Estratégico de Turismo 2023-27. Un documento que sirve para conocer cómo está la localidad a día de hoy, en qué puede mejorar y cómo hacerlo, así como afrontar con un plan de actuación los retos que tiene por delante. Para ello, el pleno votó a favor por unanimidad el proyecto que permitirá a la localidad desarrollarse en esta materia, recordando que la posición del municipio ha estado ligada en los últimos años al turismo cultural, de naturaleza, salud y bienestar.
Pero, entre otras cuestiones, el documento de 314 páginas que ya está en exposición pública recoge un análisis de sus debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades que tienen como destino en diferentes aspectos como la gestión y planificación, los recursos y productos, la comercialización o la oferta y la demanda. Entre otras cuestiones, menciona la alta competencia de destinos cercanos como una amenaza, mientras que como punto fuerte le reconoce una amplia oferta de restauración.
Ente sus debilidades, la empresa consultora encargada del documento, Sien Consulting, destaca la dispersión de su modelo territorial, con dos núcleos de población y urbanizaciones. A lo que añade la "escasa" unión turística entre l'Alfàs y l'Albir, siendo la concentración del turismo en la zona de la playa. Así, indican que según las atracciones analizadas en Tripadvisor, el 83% se concentran en l'Albir. A su vez, explica que las paradas de Tram con respecto a los núcleos urbanos son lejanas.
En cuanto a su población, reseñan que es "ligeramente más envejecida que el resto de la Comunitat Valenciana". Hay que tener en cuenta que el municipio cuenta con un alto número de residentes extranjeros jubilados. Un hecho no obstante que se relaciona también con el turismo de salud en el que han querido hacer hincapié para su desarrollo. Además, esto conlleva que la renovación de la población activa esté por debajo de la media valenciana. Finalmente, cabe reseñar entre sus debilidades la fluctuación de la contratación asociada a incrementos de demanda en periodos concretos del año así como una manifiesta estacionalidad de la demanda turística.
En cuestiones concretas, remarca la necesidad de continuar potenciando turísticamente el CEM Carabineros como centro de recepción e interpretación del Parque Natural Serra Gelada. Afirman que los usuarios que realizan búsquedas sobre l'Alfàs en Internet también lo hacen sobre destinos cercanos. Y mencionan una problemática que sacuda al sector y de la que la localidad no estaría siendo ajena: la falta de trabajadores para la hostelería provocada por el incremento del precio de los alquileres en la zona en temporada alta.
Debido al interés de mercados extranjeros en l'Alfàs, reseñan la idoneidad de adaptar sus publicaciones en redes sociales a los diferentes idiomas y atractivos para ellos. A su vez, recalcan la importancia de promocionar más y tratar de vincular la marca de l'Albir con el destino.
Por lo que respecta a sus fortalezas, l'Alfàs tiene "una localización estratégica entre dos de los polos turísticos principales de la Comunitat Valenciana (Benidorm y Altea)", dice el Plan. A lo que se añade su clima mediterráneo que favorece el desarrollo del sector. Es la que menor tasa de paro registra entre las poblaciones de más de 20.000 habitantes de la comarca (en el momento de la redacción del documento) y cuenta con un asociacionismo "ampliamente implantado" en la población.
También como punto positivo está formar parte de la Ruta del Vino de Alicante, la celebración del Festival de Cine con la presencia de profesionales importantes de la industria española cada año o tener el primer Parque Natural Marítimo Terrestre de la Comunitat Valenciana, Serra Gelada, -junto a Benidorm y Altea-.
El crecimiento del sector turístico en l'Alfàs es progresivo y la pandemia no ha cortado la evolución. En los últimos seis años han aumentado un 78% las plazas de alojamiento reglado. En paralelo, se ha formado una amplia oferta gastronómica, también concentrada en l'Albir, con un "importante número de restaurantes en el destino", unos 230, sin identificar una gran pérdida tras la covid-19. Esto le posiciona como el segundo municipio de la comarca, por detrás de Benidorm. También recalca el prestigio internacional que gozan las clínicas privadas de salud y bienestar, o la "equilibrada y consolidada programación cultural semanal y mensual".
Con todo, también tienen en cuenta las amenazas sobre el sector en l'Alfàs del Pi, aunque en este aspecto, la lista es más corta. Cabe destacar el aumento de la competencia cultural en la comarca "sin coordinación ni consenso por parte del resto de los ayuntamientos". En este sentido, también reseñan la posible "pérdida de visibilidad de l'Alfàs como destino turístico debido a la imagen y potencialidad de otros destinos cercanos".
Además, no son ajenos a uno de los males a los que se enfrenta el mundo, el cambio climático, en este caso, sobre el destino y sus infraestructuras: "Exposición a riesgos amplificados por el cambio climático (deslizamientos, desprendimientos, inundaciones, erosión, incendios y contaminación de aguas subterráneas)".
Dentro del análisis realizado, también cuentan con una serie de oportunidades para el destino, como el interés mostrado por parte de la demanda por huir de la masificación en los espacios naturales, la sinergia que permite la concentración de la oferta de servicios turísticos en el litoral de la Marina Baixa, así como el aumento del interés por el turismo activo, cultural y de naturaleza, que son los atractivos que trata de potencial el municipio.
Una vez analizada la situación del municipio, explican que la estrategia turística a seguir tiene tres elementos fundamentales: la misión y visión del destino y sus valores. Entre sus objetivos está logar un un territorio vertebrado en el que el sector ejerza un alto impacto positivo a escala social y económica, preservando a su vez el medio ambiente. Como consecuencia, se tiene que priorizar un destino saludable, vertebrado, diferencial, unido, inteligente y competitivo.
Basa su desarrollo, dice el Plan, en torno a los conceptos de hospitalidad y ética turística, así como a los cinco valores por el Código Ético del Turismo Valenciano, apoyando así el desarrollo de un turismo responsable y sostenible. El modelo se estructura en dos grandes bloques: por un lado, un destino sostenible, integrador e inteligente; y por otro, saludable y accesible.
Finalmente, el Plan sirve para identificar los retos que tienen por delante. Es el caso del posicionamiento de l'Alfàs como destino saludable y desestacionalizado a través del deporte, los servicios de salud y bienestar, la gastronomía y el enoturismo, la naturaleza y la cultura. Debido a sus características ya mencionadas, la consultora opta por poner en valor la "multiculturalidad del destino como activo turístico y continuar fomentando la integración de residentes nacionales e internacionales".
También como resultado del análisis aconsejan actuaciones para vertebrar y cohesionar turísticamente el territorio, ser un referente para las personas con discapacidad o necesidades especiales, así como paliar los efectos del cambio climático sobre el destino y sus infraestructuras. Por último, cabe destacar la mención a la mejora de la información y comercialización turística del destino y que intenten promover la creación de oportunidades laborales ligadas al turismo y la sensibilización turística de la sociedad y el tejido empresarial.