ALICANTE. La inversión española en actividades de I+D volvió a crecer en 2019, pero lo hizo por debajo del PIB, lo que conlleva una pérdida de peso del conocimiento en la estructura productiva del país. Es la conclusión más relevante del modelo de estimación sobre actividad en I+D desarrollado por la Fundación Cotec, tras el buen resultado predictivo obtenido el año anterior.
Según el modelo de Cotec, España invirtió en I+D en el último ejercicio cerca de 15.400 millones de euros, un nuevo máximo en la serie histórica, que acumula cinco años en positivo. A esta evolución en positivo habrían contribuido tanto el sector público (por tercer año consecutivo) como el privado (por quinto año). No obstante, la tasa de crecimiento rondaría el 3%, significativamente por debajo del 6,3% observado un año antes.
Esta desaceleración en el crecimiento de la inversión, combinada con el estancamiento del PIB nominal (que se mantuvo en el 3,6% en 2019), apuntaría, según los cálculos de Cotec, a un estancamiento del peso de la I+D en la estructura productiva en el 1,24% del PIB, el mismo valor registrado en 2018.
Las estimaciones recuerdan que España se mantuvo en 2019 muy lejos del nivel máximo de inversión respecto al PIB previo a la crisis, que alcanzó el 1,4% en 2010, así como del objetivo del 2% que el Plan Estatal de Investigación Científica, Técnica y de Innovación establece para 2020, y que ya no es posible cumplir.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicará los datos oficiales de la Encuesta de Actividades de I+D correspondientes al año 2019 en noviembre de 2020.
El modelo de estimación de Cotec aspira a anticiparse en unos meses a los datos oficiales sobre inversión en I+D del conjunto de los agentes económicos españoles, una variable clave para la modernización de la economía. El proyecto cuenta con la colaboración del Centro de Predicción Económica (Ceprede) y de Eva Senra, profesora de Economía de la Universidad de Alcalá y miembro de la red de expertos Los 100 de Cotec. El objetivo de Cotec es consolidar este indicador y ofrecer actualizaciones periódicas de sus estimaciones.
La herramienta se basa en un modelo anual para la evolución del gasto en I+D configurado a partir de variables macroeconómicas para cada uno de los cuatro grandes agentes involucrados (Administración Pública, Universidad, Empresas e Instituciones Privadas sin fines de lucro). Las variables macroeconómicas consideradas en el modelo estructural anual son Gasto Público (Presupuestos Política de Gasto 46, ejecución), Excedente y Crédito de Empresas, Consumo y subvenciones de explotación de ISFLSH.
En su fase piloto, además, se ha contrastado esta información macroeconómica con información de referencia a nivel microeconómico (el gasto en I+D recogido en las memorias de actividad de un total de 59 grandes compañías españolas y de 23 fundaciones). Se trata de grandes empresas de los sectores más representativos del gasto en I+D (servicios de I+D, farmacia, programación, construcción aeronáutica y espacial, etcétera).
El modelo presenta un margen de error de (+/-) 2,5 puntos porcentuales, lo que es habitual para la predicción de variables de este tipo, y es susceptible de ajustes sucesivos. En su primera estimación, publicada en julio de 2019, el indicador mostró un alto grado de acierto estimando un crecimiento del 6,5% respecto al año anterior (la cifra oficial fue del 6,3%) y un peso de la inversión en I+D respecto del PIB del 1,24%, cifra que coincidió con la oficial.