ALICANTE. La puesta en marcha de la oficina de información turística de Alicante, situada en el Paseo de Levante, junto a La Explanada, parece comenzar a despejarse, tras un intrincado proceso de tramitación y montaje. Salvo imprevisto de última hora, quedará lista para su entrada en funcionamiento en la primera quincena del mes de julio, según precisaron fuentes de Turisme Comunitat Valenciana: quien ha financiado su ejecución en una iniciativa pactada con el Ayuntamiento a partir de 2016.
Turisme prevé que los técnicos del departamento puedan completar la labor de comprobación y certificación de los trabajos realizados antes de que finalice junio. Se trata de una evaluación necesaria para que la Generalitat pueda recepcionar las obras que no había podido efectuarse hasta ahora, por las restricciones de movilidad entre provincias acordada con motivo de la declaración del estado de alarma, pese a que la empresa adjudicataria, Pramoram, había finalizado su construcción antes de la llegada de la Semana Santa.
En cuanto se certifique la finalización del montaje, y de que se compruebe que se ajusta al encargo realizado, la instalación se pondrá a disposición del Ayuntamiento ya completamente equipada y amueblada para que la dote de personal y pueda ponerse en funcionamiento. De hecho, fuentes del Patronato de Turismo precisaron a este diario que se seguía esperando la entrega para poder destinar cuanto antes a los informadores que se encargarán de atender las consultas de los visitantes.
El estreno de la oficina podría producirse, así, ya iniciada la temporada de verano más atípica de los últimos 60 años, marcada por la pandemia del coronavirus y por los protocolos de seguridad para evitar el riesgo de contagio. De hecho, con su inauguración, la labor desplegada por los informadores turísticos podría contribuir a mejorar el asesoramiento de los turistas y a resolver las dudas que pudiesen plantearse respecto a condiciones de uso y apertura de determinados puntos de interés turístico, como las playas, los museos de la ciudad o de acceso al Castillo de Santa Bárbara, por ejemplo.
La puesta en marcha del servicio se producirá, en todo caso, cerca de año y medio después de que se iniciase el montaje de la oficina. Los trabajos comenzaron en enero de 2019 tras las dudas suscitadas en el Ayuntamiento de Alicante, entonces ya bajo el gobierno en solitario del PP, sobre su carácter desmontable y, en consecuencia, sobre la necesidad de que requiriese licencia de obra.
De hecho, el actual bipartito compuesto por PP y Cs ha venido sopesando la posibilidad de acordar su traslado a otro emplazamiento próximo al considerar que su ubicación actual no genera consenso. En todo caso, esa hipótesis sigue supeditada al coste económico que pudiese conllevar la operación. Por lo pronto, al menos por lo que respecta al Patronato de Turismo, ese hipotético traslado ha dejado de ser prioritario, ya que se apuesta por su puesta en funcionamiento sin más demoras para que cumpla el fin con el que se planificó.