ALICANTE. La Confederación Hidrográfica de la Segura (CHS), organismo autónomo del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), abre el periodo de información pública para la revisión y actualización del Plan de Gestión de Riesgo de Inundaciones (PGRI) de segundo ciclo en la cuenca del Segura con el horizonte 2027, una herramienta fundamental para minimizar los riesgos de inundación y reducir o evitar los daños que las fuertes precipitaciones suelen producir en esta Demarcación.La Confederación Hidrográfica del Segura ha establecido un espacio web donde se puede acceder al borrador del plan.
El Plan de Gestión de Riesgo de Inundaciones de la Demarcación Hidrográfica del Segura es un documento que nace de la coordinación previa entre todas las Administraciones competentes y en él se definen medidas tanto continuadas como puntuales por valor de 644,07 millones de euros, a concretar hasta 2027, que responden a una apuesta por soluciones basadas fundamentalmente en la naturaleza, como la restauración fluvial, corredores verdes o zonas de almacenamiento controlado.
El PGRI es un instrumento necesario para hacer frente a los fenómenos extremos que sufre habitualmente este territorio. La alternancia de periodos de grandes sequías seguidos de episodios de abundantes precipitaciones ha obligado a los habitantes de la zona a adaptarse.
El episodio de inundaciones producido con la DANA en septiembre de 2019, que afectó al conjunto de la demarcación, pero tuvo una mayor intensidad en las Vegas Media y Baja del Segura y a la comarca del Mar Menor, puso de manifiesto la necesidad de seguir avanzando en la mitigación de los principales efectos de las inundaciones. Por ello, entre otras medidas, ya se están realizando estudios por parte de las universidades politécnicas de Cartagena y Valencia para minimizar los riesgos en estas zonas, la mayoría son soluciones verdes.
Estos planes se revisan cada seis años, siguiendo las directrices fijadas en el RD 903/2010 de 9 de julio. La elaboración de estos documentos incluye una primera evaluación en la que se identifican y recogen las Áreas de Riesgo Potencial Significativo, que servirán para elaborar los mapas de peligrosidad y mapas de riesgo de inundaciones.
El pilar fundamental de este PGRI de segundo ciclo (2022 – 2027) en la cuenca del Segura es el programa de medidas, con distintos niveles, especificando el ámbito territorial, la fase de recuperación y la tipología de la medida. Este segundo ciclo es bastante más completo que el primero (2016-2021) y está basado en información más actualizada y de mayor detalle para la consecución de los objetivos planteados. Las medidas recogidas en el PGRI de la Demarcación del Segura han sido debatidas en diferentes mesas de participación, distribuidas por los territorios que componen la Demarcación, y en las que ha existido una amplia participación.
La descripción de cada medida incluye los aspectos generales de la normativa y sus objetivos, las medidas que comprende y la autoridad responsable de su ejecución, así como el presupuesto asociado y la previsión de financiación, concluyendo con indicadores definidos para su evaluación y seguimiento.
Las medidas concretas adoptadas en este plan y el esfuerzo inversor de las Administraciones implicadas superan con mucho las reflejadas en los anteriores PGRI, conservando acciones de ordenación territorial y urbanismo, de mantenimiento y conservación de cauces y de mejora de los sistemas de medida y alerta hidrológica.
Cualquier interesado podrá enviar alegaciones, aportaciones o comentarios a este documento durante los próximos tres meses.
Los aspectos más destacados del PGRI de la Demarcación del Segura se agrupan en cuatro bloques:
Se elaborará más cartografía de zonas inundables tanto fluviales como costeras y se reforzará la colaboración con institutos de investigación como el CEDEX, el CSIC y el IGME, estableciendo programas de trabajo para el estudio de la influencia del cambio climático en los riesgos de inundaciones, así como la mejora de los mapas de caudales máximos y la aplicación CAUMAX. También se mantendrá la elaboración de informes sobre planeamiento urbanístico y la ordenación territorial.
La mejora en la precepción del riesgo y un mayor conocimiento del fenómeno permitirá abordar con éxito otra de las líneas de actuación prioritarias que es la adaptación al riesgo de inundaciones de elementos e instalaciones vulnerables localizados en las zonas inundables.
Se continuará impulsando el desarrollo de programas específicos para el incremento de la resiliencia y adaptación al riesgo de inundación en los sectores o ámbitos territoriales más severamente afectados por episodios de inundación.
Este apartado de prevención tiene asignado un presupuesto de 102,26 millones de euros.
La CHS ha iniciado líneas de trabajo específicas en coordinación con las Comunidades Autónomas para conseguir una reducción del riesgo de inundación y mejorar la coordinación entre Administraciones en las zonas más castigadas.
Así, en la Vega baja se está trabajando por una estrategia común con la Región de Murcia y la Comunidad Valenciana, y en paralelo, en la zona del mar Menor con la Región de Murcia. De estos trabajos conjuntos se realizaron diversos estudios y ejecución de actuaciones para la laminación de avenidas, tanto en el Campo de Cartagena como en la Vega Baja y la zona del Guadalentín.
Complementariamente la CHS dedicará un importante esfuerzo al mantenimiento y restauración integral del río Segura y de diferentes cauces de la cuenca del río Mula, así como la restauración de las ramblas mineras y la laminación de avenidas en algunas ramblas de la Vega Baja y de la comarca del Guadalentín.
Este apartado de protección tiene asignado un presupuesto de 528,67 millones de euros.
Se ha previsto la elaboración e implantación de una estrategia nacional de Comunicación del riesgo de inundación para lograr una actuación coordinada y planificada de todas las Administraciones.
En lo que se refiere a los sistemas de alerta meteorológica, una de las prioridades de AEMET para este ciclo es disponer de una red de observación de radar de última generación con el fin de responder con la máxima precisión posible a las necesidades de predicción de fenómenos meteorológicos extremos.
Esta apuesta por la tecnología se aplica también a la información hidrológica. La modernización y optimización de las redes de control, el incremento de puntos de medición, el establecimiento de umbrales de aviso en estaciones de aforo seleccionadas propietariamente o la mejora de herramientas informáticas para ayudar en la gestión de los recursos hídricos, y especialmente en situación de avenidas, son algunas de las mejoras previstas para este ciclo en la Demarcación del Segura.
Este apartado de preparación tiene asignado un presupuesto de 13,15 millones de euros.
Se pretende continuar y reforzar la colaboración institucional con el Consorcio de Compensación de Seguros (CCS) y la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (ENESA) en la promoción de actuaciones de prevención y adaptación al riesgo de inundación, que se irán definiendo a lo largo de la vigencia del plan.