ELCHE. El pasado 7 de enero la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) advirtió al Ayuntamiento de Elche que tiene que reducir, al igual que otros municipios, su consumo de agua potable de los acuíferos del Vinalopó de los que recibe parte de su suministro. En este caso, de la mercantil Frutales Vinalopó que es la propietaria de las fincas donde están los acuíferos de Villena de los que Elche se suministra desde 1973. Ahora el Ayuntamiento ha presentado alegaciones para que la CHJ le ofrezca alternativas realistas para poder proceder a esa reducción paulatina.
Además, el Consistorio renovó la concesión de este uso de agua potable, también destinada a riego del Camp d'Elx, en 2010. De allí procede el 12,5% del suministro de agua potable de la ciudad, lo que equivale al consumo para unas 32.000 personas. A través de los distintos planes de cuenca de la CHJ se ha aprobado que hay que ir reduciendo paulatinamente el consumo de estos acuíferos, los que se declaró sobreexplotados. Sin embargo, la confederación le ofrece al Ayuntamiento la posibilidad de obtener ese consumo de la desaladora de Mutxamel, cosa que descarta el bipartito al no tener una infraestructura adecuada para la conexión.
Desde el bipartito se destaca que la entidad esté trabajando en la puesta en marcha del trasvase Júcar-Vinalopó como alternativa, pero le pide a la misma que le ofrezca a qué posibilidades puede atenerse, ya que no se puede reducir el consumo de golpe, tendrá que ser de forma progresiva, pero la CHJ no ha puesto encima de la mesa propuestas realistas, según explican fuentes municipales. Por parte del equipo de gobierno se alega estar concienciados de la necesidad de reducir el uso de estos acuíferos, así como las fincas que beben de los mismos, pero se niegan a una "restricción tajante", por lo que pide un plan a años vista.
Actualmente el consumo potable y la consiguiente agua de riego para el sector agroalimentario el 12,5% de este bien natural del mencionado acuífero, y el 88% de la Mancomunidad del Taibilla. Desde el bipartito entienden que hay capacidad para surtirse únicamente con el agua del Taibilla, pero aseveran que la confederación tampoco aporta ningún documento que así lo corrobore.
Sobre los datos de consumo, el abastecimiento desde Villena es de un máximo de 2,6 hectómetros cúbicos anuales, una cifra que cada año va variando en función de las necesidades, aunque el registro máximo de la serie histórica que se tiene es de 2,1 hm3 en el año 2015. Así que por el momento la pelota vuelve al tejado de la CHJ una vez rechazadas las propuestas realizadas al Consistorio ilicitano.