La abogacía estrena sede: cuatro plantas para impartir formación y celebrar conferencias

ALICANTE. El Ilustre Colegio Provincial de la Abogacía de Alicante (ICALI) se hace mayor... en el sentido más físico de la palabra. Sus 3.500 colegiados (más otros 1.500 no ejercientes) dispondrán a partir del próximo viernes 13 de septiembre de una nueva sede institucional, habilitada en la misma calle Gravina en la que se situaban sus dependencias hasta ahora, pero que dobla en espacio y en prestaciones a esa sede primigenia. 

Así, se ha pasado a contar con 2.000 metros cuadrados repartidos en un edificio de cuatro plantas, frente a los 800 metros que se disponía en la actualidad, tras un desembolso global próximo a los dos millones de euros: cerca de un millón en la compra del edificio anexo al colegio, propiedad de la Compañía de Jesús (una operación aprobada en 2016) y alrededor de una suma similar destinada a su reforma y a la compra de otro piso particular que resultaba necesario para completar las necesidades de la nueva sede. ¿El objetivo? Poder organizar de un modo más funcional y moderno la prestación de los servicios que ofrece el colegio, con una renovada apuesta por la formación y por la celebración de jornadas y conferencias.  

De este modo, la nueva sede no deja de ser, en realidad, una ampliación de las dependencias preexistentes que conectan con esas antiguas instalaciones, de acuerdo con el proyecto elaborado por los arquitectos Juan Pedro Sanz Alarcón y Juan Antonio Pérez Mateos. Su propuesta fue la que resultó seleccionada por el jurado entre otros 21 proyectos, a través del concurso de ideas organizado en 2017 en colaboración con el Colegio Territorial de Arquitectos (CTAA). 

Las obras de reforma se iniciaron en abril de 2018 y han concluido ahora con el equipamiento del edificio. Así, su distribución se organiza con una recepción en su planta baja, con acceso directo desde la calle (a diferencia de lo que sucedía hasta la actualidad). Las áreas de personal, secretaría, informática y contabilidad se sitúan en la primera planta. En la segunda, se localizan las dependencias de los servicios de mediación, despachos para letrados y el área de deontología.

En la tercera, un nuevo salón de actos con capacidad para 150 personas dotado de todos los recursos necesarios para el desarrollo de jornadas y conferencias, además de dos aulas de la Escuela de Práctica Jurídica (EPJ) para 120 alumnos, en las que se imparten las clases del máster de Abogacía, a partir del convenio establecido con la Universidad de Alicante (UA). Y en la cuarta y última, la planta noble, se sitúa la biblioteca, la sala de juntas y el decanato.

Se trata de una nueva sede "a la altura de la profesión en Alicante", según incidió el decano del colegio, Fernando Candela, a Alicante Plaza. "Fuimos los primeros en establecer nuestra sede fuera de los juzgados en 1982 para situarnos en un segundo piso de un edificio en el que teníamos que usar el acceso común a toda la comunidad de propietarios; ahora pasamos a otras instalaciones acordes con las necesidades de los colegiados", incidió.

Al margen de la sede institucional, el colegio mantendrá sus actuales dependencias en el Palacio de Justicia de Benalúa (ahora ampliadas) en las que se cuenta con la oportunidad de realizar los mismos trámites y disponer de los mismos servicios que en el propio colegio.