Interactuar con las plantas o cenar bajo las estrellas servido por camareros invisibles. Esas son algunas de las proposiciones de esta empresa alicantina que quiere dar un giro al sector turístico con experiencias sensoriales únicas en las que el usuario disfrute a la vez que realiza una aportación beneficiosa para la naturaleza
ALICANTE. La ficción pasa a ser realidad con Horizontal Experience, un laureado proyecto emprendedor que fusiona la arquitectura con otras disciplinas para crear experiencias sensoriales aprovechando los elementos de la naturaleza. Esta propuesta va dirigida al sector turístico, que tiene la posibilidad de ofrecer nuevos servicios innovadores únicos a sus clientes aprovechando y poniendo en valor su entorno natural.
Horizontal Experience es una iniciativa de las arquitectas Soledad Rico y Sonia Torres que ha despertado el interés del sector turístico. Ya hay tres hoteles situados en municipios del interior la provincia de Alicante interesados en tener su propia instalación de experiencias sensoriales adaptada a su entorno.
El proyecto también ha obtenido el beneplácito de expertos y estudiosos. Ha arrasado en 2017 con la obtención de numerosos reconocimientos. Ha sido ganador de los Premios Nuevas Ideas Empresariales de Fundeun en la categoría de Turismo, primer premio de Petrer Emprende, premio Yuzz Mujer Alicante y en Doeactua también obtuvo varios galardones. Este año participará en el pabellón español de la Bienal de Arquitectura que se celebra en Valencia a partir de mayo como iniciativa ejemplar en esta disciplina.
Los premios han servido de impulso para consolidar y perfeccionar el modelo de negocio y ahondar en el plan de empresa. También para obtener visibilidad y recursos que han sido ya invertidos en dar los primeros pasos para la creación de la empresa Horizontal Experience, que se constituyó como tal en noviembre de 2017 con sede en Castalla y en el Coworking de Petrer. “Con algo más de 4.000 euros logrados con los premios y fondos propios hemos hecho, entre otras cosas, el primer prototipo que probamos en febrero y estamos preparando el segundo”, adelanta Soledad Rico.
La primera experiencia que se ha desarrollado ha sido la suite vegetal, que ofrece al turista un espacio para escuchar las frecuencias ultrasónicas producidas por las plantas a través de altavoces y auriculares. A cambio, el beneficiario del servicio debe compensar de algún modo a las plantas. Para lograrlo Horizontal propone aportar agua a las plantas recogiendo la humedad corporal con los materiales de la arquitectura y mascarillas.
“El primer experimento fue una experiencia creada para dormir la siesta en la montaña en una zona rodeada de vegetación empleando sensores que recogen los impulsos eléctricos de las plantas. Esa energía se usa para generar sonidos agradables y relajantes que llegan al usuario. Es como tener unos casos mágicos que permiten escuchar cuándo la planta emite electricidad”, explica Soledad Rico. El turista receptor puede estar escuchando esa melodía desde una cabaña o en una hamaca. “La tecnología no sólo se aplica a una construcción, sido que se puede incorporar elementos más efímeros encaminados a potenciar el contacto con la naturaleza. Eso nos permite desmaterializar la arquitectura y adaptarnos al entorno existente”, añade.
Para conseguir esto se trabaja con un equipo multidisciplinar que en el caso de la ‘siesta vegetal’ contó con geólogos, biólogos y ambientalistas. La próxima experiencia será gastronómica y contará con expertos en cocina, agricultores ecológicos y una asesora en temas de Sanidad. Horizontal está trabajando para poder dar un servicio de cena bajo las estrellas en el que el comensal será servido a distancia por camareros a través de un sistema de guías y conexiones invisibles. Como compensación y aportación al entorno natural, las dos promotoras de la idea han planteado que todo el menú esté elaborado con productos locales, ecológicos y de temporada, que cambiará en función de la estacionalidad.
“Lo que defendemos en todas nuestras propuestas es el retorno al medio, es decir, que igual que nosotros disfrutamos de las ventajas de la naturaleza, que la naturaleza también obtenga ventajas”, relata Soledad Rico. Otras diferencias de Horizontal Experience con respecto a otros servicios de turismo en la naturaleza son que el beneficiario lleva la iniciativa de lo que quiere hacer y marca el ritmo y también la adaptación a las particularidades de cada sitio para crear experiencias sensoriales únicas adaptadas 100% al entorno. La implantación de este tipo de servicios en establecimientos turísticos puede requerir una inversión mínima de 8.000 euros. Soledad Rico plantea que una experiencia sensorial “puede sustituir un servicio turístico, por ejemplo, la siesta puede reemplazar la habitación de un hotel y la experiencia gastronómica un comedor”.
El público de Horizontal Experience son principalmente establecimientos turísticos. “Nuestros clientes son sobre todo hoteles que ofrecen servicios exclusivos a sus clientes y están comprometidos con los valores medioambientales”, informa Soledad Rico. Además, tras un corto recorrido, las empresarias han detectado que también las administraciones y los particulares se han interesado por sus planteamientos. Actualmente están en negociaciones con el Ayuntamiento de Peter para que ponga a su disposición un espacio que permitirá poner en marcha la primera experiencia gastronómica en este municipio este verano.
El objetivo es que a partir de este verano Horizontal Experience empiece a generar ingresos “que se irán reinvirtiendo para diseñar otras nuevas experiencias sensoriales que generen más ingresos. Esperamos ser rentables en 2019”, expresa Soledad Rico.