Un tranvía a la altura de la Playa de Mutxavista. ALICANTE. Ni la Conselleria de Obras Públicas, ni Ferrocarrils de la Generalitat (FGV) -la empresa pública heredera de las infraestructuras ferroviarias de la Generalitat- van a esperar hasta finales de año para reactivar las obras del túnel de la Serra Grossa. De hecho, según las fuentes consultadas, ya se han dado los primeros pasos para reactivar el contrato de ejecución de los trabajos pendientes de ese tramo lo antes posible.
Como ha publicado este diario, el contrato del tramo Finca Adoc-La Albufereta fue adjudicado a una UTE compuesta por FCC y Cívica (del empresario Enrique Ortiz) por un presupuesto de más de 29 millones. El túnel, de 1,4 kilómetros, ya está perforado. Sólo falta ejecutar un 30% de los trabajos de todo el tramo (catenaria, vía, instalaciones de señalización y comunicaciones como el sistema de frenado ATP, los enclaves electrónicos y el control de tráfico centralizado) con un coste estimado de unos 9 millones.
Y, según pudo precisar Alicante Plaza, FGV ya ha abierto conversaciones con las dos compañías para que se pongan manos a la obra en el punto en el que la dejaron, en octubre de 2013, cuando la falta de liquidez de la Generalitat forzó a la Administración Fabra a activar la suspensión del contrato. En principio, no debería haber mayor problema para la reanudación de los trabajos, ya que no se espera que las adjudicatarias renuncien a los ingresos que el contrato les reportaba. Ahora bien, sí podrían plantearse ajustes como una probable revisión o actualización de precios.
El objetivo de FGV es ampliar las frecuencias y acercarlas a las que ya se ofrecen en la Línea 2 hasta San Vicente, en la que ya circula un tranvía cada 8-15 minutos
La conclusión del tramo resulta esencial para ampliar el servicio de todo el sistema Tram al eliminar el cuello de botella del trazado actual, con un trayecto en vía única en paralelo al borde litoral. Literalmente, junto a él. Con el nuevo trazado, a través del túnel bajo la Serra Grossa, se dispondrá de doble vía electrificada entre los apeaderos de Sangueta y La Isleta, lo que permitirá ampliar las frecuencias de paso de líneas que conectan con el norte de Alicante: la L-4 en dirección a Playa de San Juan; la L-3 hacia El Campello, y la L-1 hasta Benidorm. ¿A partir de cuándo? La previsión que maneja la Conselleria de Obras Públicas es que el tramo quede completamente finalizado en 2019.
En la actualidad, las limitaciones de ese trazado en vía única obligan a ofrecer pasos cada 30 minutos con sus consiguientes esperas. Con la puesta en servicio del túnel, la aspiración de FGV es tender a las frecuencias que se ofrecen en la L-2 hacia San Vicente, con pasos de entre 8 y 15 minutos, en distintas franjas horarias.
