Foto: GVAVALÈNCIA. Días atrás, este periódico se hacía eco de las explicaciones de la Conselleria de Sanidad respecto a la situación de los recientemente contagiados de cara a la dosis de refuerzo: la tesis está clara. Aunque la recomendación es que las personas que están en esta situación esperen cinco meses para la nueva vacuna, si bien es posible que sean citados estos días y también podrían acudir dado que inocularse ahora la citada dosis "no es perjudicial", recalcan las fuentes oficiales consultadas por este diario.
Más allá de que se pueda cuestionar o no que sean los ciudadanos los que se vean obligados a tomar esta decisión, las circunstancias de esta sexta ola -quinta en la Comunitat Valenciana- también está generando otros problemas de carácter logístico especialmente en lo que se refiere al pasaporte covid.
Cabe recordar que existe una figura dentro de estos certificados que se denomina de "recuperación". Un pasaporte que tiene 180 días de vigencia habilitado, precisamente, para los que han sufrido la enfermedad recientemente y por eso no están al día de la vacunación al interpretarse que poseen anticuerpos de forma natural.
Ahora bien, el reglamento europeo no admite la prueba de antígeno positiva para este certificado, lo cual elimina la posibilidad de que muchos valencianos puedan obtenerlo. El motivo es que, con la expansión de contagios en las fiestas navideñas y el colapso de la sanidad pública una gran cantidad de personas descubrieron su positivo gracias a un test de antígenos, lo que invalida la posibilidad de obtener este pasaporte y, por tanto, la posibilidad de viajar a otros países. Tal y como narraba el diario Levante-EMV este miércoles, Italia es uno de los destinos que más se complica, dado que el certificado de vacunación expira a los seis meses.
Pero más allá de esto, hay otros problemas. Pese a que los datos se supone que están cruzados, no siempre los positivos por PCR detectados en la sanidad privada se encuentran almacenados en la pública, por lo que los afectados se encuentran en la misma situación de los que dieron positivo a través de antígenos.
Al margen de los problemas relacionados con los viajes, hay otras situaciones con las que puede tropezar el usuario. En caso de no haberse puesto la dosis de refuerzo por haber pasado la covid y esperar los cinco meses de rigor, habrá un momento en el que expirarán los nueve meses de margen desde la segunda dosis que marca la validación del certificado.
La Conselleria de Sanidad, según ha podido saber este diario, la app diseñada por la Generalitat para que los bares, restaurantes, residencias y otros establecimientos comprueben la validez del pasaporte covid sí autorizaría al usuario que tenga la pauta completa inicial inoculada aunque no haya pasado la dosis de refuerzo. Sin embargo, la aplicación utilizada inicialmente a principios de diciembre por estos locales -la valenciana no estaba lista aún- fue la luxemburguesa 'Covid check', que sí tiene en cuenta si existe o no la dosis de refuerzo administrada, por lo que podría dar problemas a los usuarios que se hayan quedado en tierra de nadie a la espera de la siguiente dosis.
Unos problemas logísticos que invitan a pensar que el mes de febrero podría ser el último de vigencia férrea del pasaporte covid, si bien no son pocos en el Gobierno valenciano que tienen dudas sobre si prescindir de esta herramienta en el mes fallero.
