Carlos Mazón, este miércoles en Les Corts. Foto: CORTS/JOSÉ CUÉLLARVALÈNCIA. No es que exista un escrutinio sobre la moda en Les Corts a excepción de –es innegable– algún comentario en voz baja. Tampoco hay un protocolo impuesto, salvo fans o pasotas de lo que hay quien llama decoro. Pero este miércoles el hemiciclo tuvo una imagen que rompía con la habitual: un presidente de la Generalitat sin corbata.
El debate en el Parlamento siguió su curso sin que el asunto importara. Nadie paró la sesión al grito de "¡se está perdiendo todo!". Carlos Mazón habló desde la tribuna y sus palabras fueron escuchadas en el contenido. Pero el jefe del Consell iba sin corbata. Se trata de la primera vez que acude sin esta prenda a un debate de la Cámara y, que se recuerde, es el primer presidente de la Generalitat que no la usa en el Parlamento. Difícil será encontrar una foto de Joan Lerma, Eduardo Zaplana, José Luis Olivas, Francisco Camps, Alberto Fabra o Ximo Puig sin corbata en Les Corts.
A poco que se conozca a Mazón, uno sabe que no es que le agrade especialmente esta prenda que a diario alterna. Unos días con y otros sin. No se trata de algo estudiado a nivel de imagen. "Él es así", dicen de su entorno. "Es el primer presidente que hace muchas cosas, como ir corriendo al Palau, hacer directos de redes sociales o meter a Compromís en la Mesa de Les Corts", cuelan en tono de chanza.
Aún así, parece evidente que el jefe del Consell quiere explotar su estilo desenfadado. En ello trabaja, como bien demuestra especialmente en redes sociales.
