MADRID (EP). Citroën vuelve al segmento de los grandes turismos con un modelo innovador, el C5 X, que combina características estilísticas de las berlinas, los familiares y los SUVs.
Sus formas, redondeadas y musculosas, combinadas con líneas estilizadas y elegantes, crean una forma fluida, dinámica y
elegante que combina todo el estatus y la elegancia de una berlina, el dinamismo y versatilidad de un familiar y la modernidad y aspecto de robustez de un SUV.
Este nuevo modelo, destaca la compañía, cumple a la perfección las múltiples expectativas de quienes desean un gran turismo y, además, buscan una alternativa más moderna y funcional a las berlinas, los familiares y los SUVs.
Según Frédéric Angibaud, diseñador del C5 X: "El diseño alargado del habitáculo y los largos 'spoilers' situados en la parte trasera del coche, así como todo lo que se ha diseñado en horizontal, como las alargadas ventanillas laterales, son señas de identidad de las berlinas".
El estilo de la carrocería del C5 X es musculoso y con una aerodinámica optimizada para reducir el consumo de combustible.
"El gran maletero y su amplísimo acceso son lo que se espera de un coche familiar", resalta Frédéric Angibaud. El portón trasero ofrece una apertura amplia y funcional, con un umbral de carga bajo para un uso diario fácil y práctico.
"Del SUV ha tomado prestado su aspecto 'elevado sobre la carretera', esa postura alta aporta una sensación de protección y solidez. El estilo de sus laterales y sus curvas representa el tipo de robustez que se encuentra en un SUV", recalca Frédéric Angibaud.
El perfil del C5 X presenta numerosos rasgos de SUV: una postura elevada combinada con grandes llantas de 720 mm, una posición de conducción más alta que la de las berlinas tradicionales y elementos de protección de color negro mate en toda la parte inferior del vehículo, que dan seguridad y acentúan la impresión de robustez y solidez.