ELCHE. La Generalitat Valenciana ha impuesto una multa de 150.000 euros al Hospital del Vinalopó de Elche por una infracción muy grave en materia de prevención de riesgos laborales. Es la más alta impuesta en esta materia en un centro sanitario en la comunidad. Se trata de una sanción por la falta de protección a los trabajadores al estar expuestos a un agente cancerígeno durante su horario laboral. Dicho agente es el formaldehído, un compuesto químico que se utiliza en la fabricación de varios productos, como medicamentos, o que se utiliza para la conservación de cadáveres frescos o muestras biológicas como biopsias, que es el caso que concierne al laboratorio de Anatomía Patológica por el que este hospital público de gestión privada ha sido sancionado.
La fecha de extensión del acta de infracción fue el 30 de enero de este año, y el pasado 29 de septiembre adquirió firmeza, y además de la cantidad económica, la sanción también suponía que fuera hecha pública, que es lo que se pudo ver el 31 de octubre en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV). Una consecuencia que llega tras la denuncia de los delegados de prevención a través de CC.OO. y la posterior visita al laboratorio primero del Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo (Invassat) y después de la Inspección de Trabajo al comprobar los primeros la gravedad del asunto. Inspección de Trabajo analizó la manipulación en tareas de recogida y traslado de muestras de tejidos orgánicos y el laboratorio, constatando las deficiencias del mismo e hizo una propuesta de sanción a la Dirección Territorial de Empleo, que es la que se ha conocido recientemente.
Desde 2012 se hicieron varios análisis en dicho laboratorio en los que se objetivaron niveles altos de formaldehído, un compuesto que se empezó a considerar cancerígeno en 2016, a pesar de que desde 2014 documentos de la Unión Europea ya lo trataban así. "Por lo tanto, desde 2012 se sabe que los niveles son tóxicos y los delegados de prevención tendrían que haber sido informados", indican fuentes sindicales. A partir del uno de enero de 2016 el formaldehído pasó de ser considerado sustancia tóxica a cancerígena, aunque según denuncian desde el comité, previamente a esta fecha deberían haberse tomado medidas al respecto. El retraso de la entrada en vigor de la Normativa Europea estuvo, según indican, "claramente, relacionado con la incapacidad de los hospitales europeos y de los españoles en particular para adaptarse a la normativa".
Según denuncian, es entonces cuando se deciden algunas medidas sin tener en cuenta al comité de seguridad y salud, un órgano paritario formado por la mitad de responsables de prevención de riesgos laborales de los sindicatos y la otra mitad de la empresa. En lugar de crear un subcomité para el formaldehído desde este órgano, lamentan desde CC.OO., se creó desde el hospital un comité de formaldehído para abordar el asunto. Decidieron comprar unas máquinas que embolsan al vacío las muestras, y para después introducir este agente en el servicio de anatomía patológica. En dicho proceso, la exposición a este componente puede tener lugar en el momento de manipulación de los tejidos en dicho servicio, lo que evita la exposición en otros departamentos del hospital como quirófanos, endoscopia o consultas externas.
En la sala de tallado de muestras es donde se realiza el estudio de la biopsia y en el laboratorio donde se procesa. En este caso, es la plantilla quien se encarga de recoger las muestras orgánicas de los diferentes departamentos; después tiene lugar el traslado al laboratorio y la posterior manipulación de estas muestras en el mismo. En las distintas operaciones se puede emitir en el ambiente este componente, pudiendo ser inhalado o entrar en contacto con los ojos y la piel de los trabajadores. En mediciones realizadas de nuevo en 2015 y 2016, en la zona de tallado y el almacén de las muestras se encuentran altos niveles de formaldehído.
En este sentido, los delegados de prevención señalaron que ya habían advertido de que tras el nuevo comité creado, seguía habiendo problemas en el laboratorio, como la falta de mascarillas especiales para el equipo —sólo había una para los trece trabajadores del laboratorio—, climatización insuficiente, falta de lavaojos, que las pinzas de las máquinas adquiridas para el sellado de las muestras no eran las adecuadas o que las bolsas donde se depositan las biopsias eran defectuosas, por lo que se cierran mal y dejan vertidos de este agente en el almacén. Desde la institución se corrigieron algunas de las deficiencias, otras parcialmente y otras aún quedan por corregir. En cuanto a las máscaras adecuadas, por ejemplo, aseveran que tardaron cinco meses en llegar.
También se han comprado dos mesas de tallado con campanas de extracción adecuadas —donde se realiza el estudio de las piezas quirúrgicas y de las muestras pequeñas de biopsia—, "pero la máquina de envasado sigue emitiendo niveles inaceptables de formaldehído", señalan desde el comité. Dicha máquina se encuentra en la sala de tallado, ha sido separada mediante una mampara y se obliga a las técnicas a utilizar equipos de protección individual cuando precisan entrar en este espacio. También explican que el servicio abarca las muestras del departamento de Torrevieja y Elche Crevillente Salud, lo que junto a las dos mesas de tallado supone mayor carga de trabajo y que entren más trabajadores, por lo que es una medida insuficiente para la prevención.
Por otra parte, hubo algunas empleadas que estuvieron en el laboratorio desarrollando su trabajo con total normalidad, embarazadas o en periodo de lactancia, sin saber al nivel de exposición al que se enfrentaban y hay que tener en cuenta que el formaldehído provoca cáncer a largo plazo. De hecho, las mujeres en edad fértil, pueden presentar aumento del riesgo de enfermedades hematológicas en sus hijos como la leucemia. Asimismo, como esta enfermedad se desarrolla a largo plazo, cuando más tiempo se está expuesto, más probabilidad hay de contraerla. Los cánceres que provoca este material se relacionan fundamentalmente con las vías aéreas superiores; unas enfermedades que pueden no se desarrollarse hasta dentro de 20 años.
En lo que respecta a la parte del hospital, desde Alicante Plaza se contactó para conocer su versión de los hechos, pero por el momento no quieren realizar declaraciones.